Mostrando entradas con la etiqueta NEW JERSEY. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta NEW JERSEY. Mostrar todas las entradas

martes, julio 29, 2008

Kwame Brown a Detroit, Ricky Davis a Clippers y Nenad Krstic a... Moscú

Siguen los movimientos en este verano de tirones. Cada comienzo de semana asistimos a la confirmación de unos cuantos fichajes, y ya hemos tenido nuestra particular ración. Con sorpresas, como la llegada de Ricky Davis a los Clippers, con incertidumbres, como la que crea Kwame Brown en Detroit, y con noticias anunciadas, como el regreso de Nenad Krstic a Europa. Además, Will Solomon hace el camino a la inversa y regresa a la NBA, mientras que los Sixers contratan a Kareem Rush como tirador.

Los Clippers no paran de moverse desde que comenzó julio. En sólo un mes han lavado por completo la cara de la franquicia y, sobre el papel, han reaccionado bien (salvo el traspaso de Brevin Knight) a las trabas que se han encontrado por el camino. En el penúltimo episodio, han llenado el hueco que iba a ocupar Kelenna Azubuike con el fichaje de Ricky Davis, que llega con un contrato por dos temporadas, la segunda de ellas opcional.

Aunque los términos económicos no se han desvelado, el hecho de que se haya incluido una Player Option indica que el contrato está muy probablemente por debajo del 'caché' del jugador, por lo que las cantidades acordadas podrían no andar muy alejadas de esos tres millones al año que había firmado inicialmente Azubuike. Habrá que permanecer atentos, pues.

Es la oportunidad de Davis para reflotar una carrerea que, si bien nunca fue fulgurante, en su corto paso por Miami ha rozado lo mediocre. Llega a la franquicia angelina con el cartel de anotador desde el banco, de buen suplente para las alas que permitirá incluso poner sobre el parqué una alineación de hombres pequeños, pasando a Al Thornton al puesto de 'cuatro' y practicar un baloncesto más rápido y directo. A pesar de su trayectoria descendente, diremos a su favor que en las últimas temporadas ha experimentado una más que aceptable mejora en el tiro exterior.

El que no tiene que reflotar su carrera es Kwame Brown. Más que nada porque su carrera nunca llegó a estar en la superficie. Lejos quedan los tiempos del número 1 que trataba de explotar en Washington. Con Phil Jackson acabó por convertirse en un interior defensivo muy decente y con tal etiqueta llega a los Pistons. A cambio, percibirá 8 millones de dólares por 2 temporadas, un buen pellizco visto lo poco que ofrece el jugador. El segundo año del acuerdo es opcional, por lo que el verano que viene el jugador podría volver a salir del mercado... y los Pistons librarse del bulto.

Queda lejos de duda que la gestión de Joe Dumars al frente de los Pistons ha sido notable. Sin embargo, este hecho no le libra de poder cometer errores. Aún a riesgo de pecar de atrevido (que no), los de Michigan bien podrían haberse ahorrado el movimiento, puesto que en Amir Johnson ya contaban con un jugador interior intenso en defensa y escaso en conocimientos del juego, precipitado en sus acciones, joven y con un contrato muy similar al de Kwame.

Tras la marcha de Jarvis Hayes, quizá hubiera sido más conveniente centrar su atención en la contratación de un alero suplente de garantías para dar descanso a Tayshaun Prince. A expensas de lo que suceda con la situación de Josh Smith, los Pistons siguen dando continuidad al bloque que les ha hecho fijos en las Finales de Conferencia.

No por anticipada, deja de sorprender. Días atrás hablábamos de la posibilidad real de que Nenad Krstic pudiera acabar jugando en "Europa". En concreto, el Maccabi era el equipo que había mostrado un mayor interés en hacerse con los servicios del jugador. Sin embargo, los petrodólares rusos vuelven a ganar la partida y el pívot serbio jugará las dos próximas temporadas jugará en el Triumph de Moscú a cambio de 3 millones de euros al año, un salario que según la ESPN sería equivalente a unos 9 millones de dólares por año.

Con Krstic ya son dos los jugadores de los Nets que han abandonado este verano la franquicia para cruzar el charco, media Europa, y llegar hasta Moscú. Hasta hace poco, los Nets tenían un exceso de jugadores en plantilla y demasiados interiores. Es curioso cómo sin mover un dedo (y cuando lo han hecho, ha sido para mal), ya tienen el problema resuelto.

Como es habitual en los contratos que están firmando estos jugadores en el Viejo Continente, puede regresar libremente a la NBA al final de la temporada que viene. Por si acaso, los Nets conservaron sus derechos extendiéndole la Qualifying Offer. Y es que lo que parecía ser el comienzo de una carrera prometedora en la NBA, ha quedado en stand-by por culpa de una lesión de rodilla.

Otros que siguen adelante con sus deberes son los Philadelphia 76ers, aunque en su caso les queda lo más difícil. Por el momento, siguen reforzando lo más profundo de su banquillo, esta vez con la llegada de Kareem Rush. Aunque aún no se ha hecho oficial, parece que jugador y franquicia han alcanzado un acuerdo a cambio del mínimo salarial, que en su caso corresponde a algo menos de un millón de dólares al año.

Con un gran proyecto en ciernes, el equipo sólo estaba falto de un buen tirador exterior para redondear la plantilla. Eso es lo que han conseguido con Rush, pero el perfil de temporero que arrastra no se ajusta con el nivel que exige el equipo, muy superior al de la última temporada. Tras un inicio ilusionante en Los Angeles Lakers, su carrera se enfrió hasta el punto de tener que pasar un año en Lituania (formaba parte del Lietuvos Rytas que se enfrentó al Real Madrid en la final de la Copa ULEB) para poder volver a la liga norteamericana.

Así pues, Philadelphia sigue comprando 'trapillos' para su fondo de armario, pero aún quedan dos movimientos fundamentales este verano: las renovaciones de Andre Iguodala y Louis Williams. Del primero depende el salto de calidad del equipo (sin él, los Sixers regresarían al mismo punto en el que estaban la temporada pasada), mientras que el segundo es el único relevo de garantías para Andre Miller, y un buen anotador desde el banco.

Cierra el capítulo de nuevas incorporaciones otro jugador con pasado reciente en Europa, aunque en su caso de vuelos mucho más bajos que los jugadores que protagonizan la emigración de retorno. Will Solomon abandona el Fenerbahce para unirse a los Toronto Raptors. Todos estamos de acuerdo que comenzar tu carrera en los Memphis Grizzlies es un golpe bajo (hola, Pau), por lo que no ha podido ser hasta los 30 años cuando este base ha podido regresar a la NBA.

A falta de mayor atractivo para los agentes libres, los Raptors siguen obligados a mirar a Europa para hacerse con jugadores que puedan ayudar al equipo. Visto el gran acierto que tuvieron con Anthony Parker (aunque con 'el hermano de Candace' era facil), vuelven a repescar a un americano olvidado. En este caso, llega para pelear por el puesto de segundo base con Roko Ukic, e incluso podría llegar a jugar algunos minutos como 'dos'. Desde luego que la competencia para Calderón no va a ser demasiada.

jueves, julio 24, 2008

Los Warriors se hacen con Marcus Williams. Mo Evans se complica y Azubuike se queda

Los Golden State Warriors siguen con la particular remodelación de plantilla a la que se han visto obligados con la marcha de Baron Davis. Esta vez, la cosa ha ido de tapar agujeros. No en el sentido lascivo de la palabra, sino en el puramente deportivo: Marcus Williams reemplazará al angelino en las labores de director de juego.

A cambio del joven base formado en Connecticut, los Warriors mandaron a New Jersey una primera ronda... de 2011... y protegida. Así, para el citado draft de 2011, la franquicia de Oakland seguiría disponiendo de su primera ronda en caso de que esta fuera de lotería, mientras que para 2012 y 2013, la protección es del Top 11. Si en 2013 los Nets vuelven a quedarse sin esa primera ronda, recibirán a cambio las segundas rondas de los Warriors de 2013 y 2015. Resulta realmente difícil tratar de sacar menos por un jugador al que se le supone un buen futuro.

Pero desde la llegada de Keyon Dooling a New Jersey, como ya recogimos en su día, los rumores que apuntaban a la salida del joven base del equipo se hicieron muy insistentes. Si en algún momento pareció poco probable que Kiki Vandeweghe pusiera en el mercado a Williams, las dudas no tardaron en ser despejadas de un plumazo. Resulta curioso que para lavar la cara del equipo alguien se deshaga de un jugador futuro como éste. Y menos a un precio tan asequible.

Visto el trato, no resulta extraño que Golden State perdiera el presunto interés en hacerse con Louis Williams. La boyante situación por la que atraviesan en Oakland hizo pensar a la directiva en una posible oferta sobre el agente libre restringido de los Philadephia 76ers, pero finalmente optaron por un traspaso que agradecerá el equipo, pues no cabe duda de que el de Connecticut es un jugador que se ajusta mejor al tipo de base que necesitaba Don Nelson.

Mientras que Louis es un jugador que podríamos calificar como "similar" a Monta Ellis (buenos anotadores, con la penetración como principal recurso, sin un tiro notable y con el oficio de base aún por aprender), Marcus es un base al que el estilo rápido y al contragolpe de los Warriors puede ayudar a asentarse definitivamente en la liga. Mientras tanto, seguirá siendo, como en toda su carrera, el base suplente.

Y es que a pesar de este fichaje, parece poco probable que Nelson se eche atrás en su intención de llevar a cabo el experimento de Monta Ellis como director de juego. La salida de Baron Davis dejó un hueco demasiado grande, y no es de esperar que lo rellene un jugador que apenas ha disfrutado de continuidad desde que llegó a la NBA. Su labor, por tanto, será la de cubrir las espaldas de Ellis y permitir que éste juegue de escolta durante algunos minutos.

LA LLEGADA DE MAURICE EVANS SE COMPLICA, Y KELENNA AZUBUIKE SE QUEDA (update).

Poco después de hacerse con Marcus Williams, los Warriors llegaron a un acuerdo para la contratación del agente libre Maurice Evans, gracias al cual el jugador cobraría 6.4 millones de dólares por tres temporadas. Sin embargo, el escolta de los Orlando Magic parece haberse echado atrás en el último momento (el fichaje no llegó a hacerse oficial), por lo que Golden State ha decidido acudir al derecho de tanteo por Kelenna Azubuike.

Cuando todo parecía indicar que Evans ocuparía el lugar de Azubuike en la rotación del equipo, el ex de los Lakers se descolgó subiendo sus pretensiones económicas. A sus exigencias, los Warriors respondieron de la forma más contundente posible: igualando la oferta que Los Angeles Lakers presentaron por
el jugador británico. De esta forma, parece que Maurice Evans deberá buscarse un nuevo equipo, puesto que su llegada estaba sujeta a la salida de Azubuike.

Y es que el que fuera escolta de los Orlando Magic, está capacitado para cumplir con las mismas funciones de las que se encargaba Azubuike la temporada pasada: un jugador atlético para las alas, que aporte intensidad en defensa para propiciar los contraataques y con una mano decente en ataque. Así pues, no sólo comparten puesto, sino que también comparten funciones.

Con los puestos de escolta y alero muy cubiertos en Florida, Evans deberá encontrar cobijo en otro equipo. Suponemos que con los ánimos más calmados.

lunes, julio 21, 2008

Continúa la fuga de talentos a Europa ¿Quién será el siguiente?

En la última semana, hemos asistido a un suceso de difíciles precedentes: cada vez son más los jugadores de clase media que abandonan la NBA en busca de mejores contratos. La depreciación del dólar con respecto al euro, y la creciente inversión de los equipos rusos y griegos, pone a disposición de estos jugadores de corte medio, contratos a los que no aspirarían en liga norteamericana.

El primero en confirmar su marcha fue Carlos Delfino, que cambió los Toronto Raptors por el Khimki ruso. Según diferentes medios argentinos (Clarín, La Nación), el contrato ascenderá a nada menos que 30 millones de dólares por las tres próximas temporadas. Acusado durante
su carrera de rendir por debajo de lo que su talento indicaba, estas cifras superarán incluso los ingresos de su compatriota Manu Ginobili.

El alero argentino, que acabó contrato, rechazó el interés de equipos como los Detroit Pistons, que presuntamente le habrían ofrecido 13.5 millones de dólares por tres temporadas para tenerle de vuelta en Michigan. Fuera o no cierta esa intención, las cifras quedan muy por debajo de las que le ha firmado el Khimki.

Allí parece que se volverá a encontrar con Jorge Garbajosa, cuya decisión de aceptar la oferta de los rusos podría hacerse también oficial en los próximos días.

Otro que abandona los Raptors para jugar en el Viejo Continente la próxima temporada es Primoz Brezec, que alcanzó un acuerdo con la Lottomatica de Roma. Los romanos se convirtieron en uno de los focos de interés cuando se hicieron con los servicios de Brandon Jennings después de que éste no superara el equivalente al examen de Selectividad y viera por tanto cerradas las puertas de Arizona. Precisamente, ocupará el puesto de Roko Leni Ukic, que tras su cesión en Roma jugará en la NBA... con los Raptors. Qué pequeño es el mundo a veces.

Pero Brezec no es el único esloveno que regresa a Europa.
Bostjan Nachbar también hará las maletas y volverá a cruzar el charco. Abandonará los New Jersey Nets para unirse al Dínamo de Moscú, a cambio de la nada desdeñable cifra de 9 millones de euros por 3 temporadas. Más de 14 millones de dólares, un contrato que nadie le hubiera ofrecido en la NBA.

En su caso, es necesario tener también en cuenta lo caros que se habían puesto los minutos en el equipo del oeste del río Hudson. Las llegadas de Bobby Simmons, Jarvis Hayes y Ryan Anderson complicaron su situación en el equipo por lo que, si la oferta ecónomica no hubiera sido suficiente, la perspectiva deportiva se encargó de disipar cualquier duda.

Confirmados estos casos, aún quedan otros en el aire. Tras las salidas de hombres como Nikola Vujcic (Olympiakos) y Terence Morris (CSKA Moscú), el Maccabi Tel-Aviv necesita un hombre interior de renombre. Para cubrir su marcha, los israelíes estarían pensando en... Nenad Krstic, que tampoco ha resuelto aún su futuro con los Nets.

Es curioso como la sobrepoblación que sufren en New Jersey puede arreglarse de un día para otro y de la peor forma posible. Sin recibir nada a cambio.

Pero el caso que levantaría más ampollas sería sin duda el de Josh Childress, que podría estar sopesando muy seriamente la oferta que le ha presentado el Olympiakos: 20 millones de dólares por 3 años. Según Adrian Wojnarowski (vive Dios que he escrito bien el nombre de esta insigne pluma de la NBA), el escolta de los Atlanta Hawks habría viajado ayer domingo a Grecia para conocer más de cerca el interés del equipo del Pireo, que incluso se ocuparía de pagar los impuestos (algo que no sucede en la NBA).

Según afirma, el jugador estaría indeciso al 50%. Es agente libre restringido y, como tal, los Hawks juegan con su condición para hacerse de rogar con la oferta, pero lo cierto es que salvo los Memphis Grizzlies, nadie en la liga está en condiciones de poder ofrecer un contrato superior a la Mid-Level Exception y, por tanto, de acercarse a las condiciones que han puesto sobre la mesa los griegos.

Su salida, sí supondría un motivo de preocupación para la liga norteamericana, puesto que ya no se trataría de jugadores internacionales que toman el camino de vuelta a Europa, sino de un jugador aún joven, de proyección y formado en Estados Unidos que abandona la NBA para caer en las manos de un gigante griego.

¿Aceptará el reto? ¿Reaccionarán los Hawks? Estaremos al tanto.

sábado, julio 19, 2008

Keyon Dooling llega a los Nets. Sobra personal en New Jersey

Como era de esperar, Keyon Dooling no seguirá la temporada que viene en los Orlando Magic. El jugador renovará su contrato con la franquicia de Florida... para después marcharse con destino a New Jersey. El escaso margen con que cuentan los Nets obligará a que la llegada del veterano 'tweener' se haga mediante la forma de un 'sign & trade'. Hablamos en futuro porque la operación no se hará efectiva hasta mediados de la próxima semana, pero ambas partes ya han alcanzado el acuerdo.

El jugador firmará un contrato de renovación por 3 años (el último de ellos parcialmente garantizado) a cambio de 10.5 millones de dólares, cantidades superiores a la Bi-Annual Exception que le ofrecieron los Orlando Magic y que se cumplen con los deseos del jugador, pues seguirá cobrando lo mismo que la temporada pasada.

Dooling llegará para ocupar el puesto de base suplente, por detrás de Devin Harris y, llegado el caso, dará también descanso a Vince Carter.

EL ENCAJE DE BOLILLOS.

La situación en la que se encontraban ambas franquicias, hizo que el sign & trade fuera la única salida posible a la situación. Orlando tiene un margen salarial muy escaso, y no estaba dispuesto a gastarlo en la renovación de Dooling ni en la llegada de un jugador con un contrato similar. Por otra parte, los New Jersey Nets ya gastaron su Mid-Level Exception en las contrataciones de Eduardo Nájera y Jarvis Hayes, por lo que sólo podían optar a un agente libre mediante traspaso.

Para conjugar todos los intereses, los Nets hicieron uso de la Trade Exception de 3.3 millones de dólares que lograron en el traspaso de Jason Kidd. De esta forma, podían hacerse con el jugador y Orlando no comprometía su situación salarial de forma innecesaria. Los unos consiguen su objetivo y los otros se deshacen del 'problema' sin que tenga consecuencias para la franquicia.

El 'problema' se presenta ahora para New Jersey, que cuenta en estos momentos con 16 jugadores bajo contrato y queda aún pendiente la renovación de Nenad Krstic. El exceso de jugadores, y la llegada de Dooling parece que pondrán en peligro al joven Marcus Williams y a alguno de los integrantes del sobrecargado juego interior 'net'.

A expensas de lo que ocurra, Kiki Vandeweghe tiene ante sí la tarea de renovar a Nenad Krstic. El año pasado, las lesiones convirtieron un prometedor inicio de carrera en un punto muerto, situación en la que está ahora mismo el pívot serbio. Tanto es así que desde la gerencia de los Nets se ha afirmado que sólo se igualarán ofertas por el jugador siempre y cuando no pongan en peligro la flexibilidad salarial del equipo para el verano de 2010.

Esto es, sólo continuaría en caso de aceptar un contrato firmado a la baja o de una duración de tan sólo dos años. Estaremos a la espera porque, si con ocho incorporaciones son la franquicia más activa, parece que la diversión aún no ha acabado al oeste del Río Hudson

domingo, julio 13, 2008

Bogut renueva, Eduardo llega y Julián se va.

Días de ajetreo en Milwaukee y New Jersey. Intercambio de cromos con sorpresa: por fin el chino Julián encontró una vía de escape. Pero también lo hizo Richard Jefferson, que iba camino de convertirse en el hombre-net. Andrew Bogut renueva y New Jersey se anota dos tantos con la Mid-Level.

Otro de tantos traspasos que tuvo lugar durante la noche del draft y que han sido recientemente formalizados. Yi Jianlian ha tardado un año en poder encontrar la salida de Wisconsin. Por si no encontraba la puerta, se la han acabado enseñando: se marchó con rumbo a los Nets junto con Bobby Simmons a cambio de Richard Jefferson.

No había que ser muy avispado para saber que el chino no haría carrera en un Milwaukee. Nada más verse en una ciudad con tan escasa (o inexistente) comunidad china, se negó a jugar con los Bucks. A partir de ahí, lo que todos sabemos. El caso es que por fin ha encontrado acomodo. Las circunstancias de su nuevo equipo le ayudarán además a tener oportunidades. El puesto está sobrecargado, pero el que no es mediocre, es joven, y todos deben ganarse minutos. Los más beneficiados serán los Nets, de eso no hay duda.

Llegará también Simmons, para cubrir el hueco que deja Richard Jefferson. Desde que cayó en las garras del dinero, paso de ser revelación del campeonato a sospechoso habitual. No se ha vuelto a ver rastro alguno de ese jugador que una vez mereció esperanza. El tiro parece haber desaparecido de su repertorio y en defensa vuelve a ser uno más. Se encuentra ahora con una oportunidad inmejorable para volver a salir a flote.

A cambio, los Bucks reciben a un jugador del calibre de Richard Jefferson, un anotador más que notable dentro de la liga. Maduró en New Jersey, hasta convertirse en el segundo máximo anotador de la historia de la franquicia, y ahora en Milwaukee se encontrará otro gran artillero, Michael Redd, que junto a Maurice Williams y Andrew Bogut, hacen del equipo de Scott Skiles (quién se lo iba a decir a él), un equipo sobrado de recursos ofensivos.

ANDREW BOGUT CONTINUARÁ CINCO TEMPORADAS MÁS.

Tanto protagonismo de los jugadores exteriores, sin embargo, termina por eclipsar a un jugador interior de gran valía, el australiano Andrew Bogut. Llegó como un pívot muy solvente en ataque, tanto a la hora de anotar como de repartir juego. Sin embargo, su juego se está limitando hasta la extenuación y su protagonismo ofensivo pasa por ser secundario más veces de las debidas.

Sin embargo, mantiene la consideración de gran pívot, y como tal firmó su renovacion. El contrato consta de una parte fija de 60 millones de dólares por 5 años, unas cantidades a las que podría sumar 12.5 kilos adicionales por incentivos (individuales y colectivos, no se han desvelado más datos acerca de esta cláusula).

Incentivos que, en cualquier caso, suponen una cifra mucho mayor que la que vaya a percibir Luc Richard Mbah A Moute. Luc para los amigos. El interior camerunés ha firmado un contrato multianual del que no se conocen datos pero, mirando otros casos, debería situarse poco por encima del millón de dolares por dos temporadas o cerca de los dos 'kilos' por tres.

CÓMO USAR UNA M.L.E. Y NO EMPEÑARSE EN EL INTENTO.

Los New Jersey Nets exprimieron la Mid-Level Excetion para conseguir refuerzos y, por el momento, la jugada no parece haberles salido mal. Lograron a Eduardo Nájera y Jarvis Hayes y, de haberla necesitado, la hubieran podido utilizar todavía para firmarle el contrato a Chris Douglas-Roberts. Sin embargo, como están por debajo del límite salarial, no fue necesario.

El novato, señalado por muchos como uno de los principales candidatos a convertirse en el robo del draft, firmó un contrato de dos años valorado en poco más de un millón de dólares. Concretando más, cobrará 440.000 $ en su primer año y subirá hasta los 736.000 en el segundo. 'Pecata Minuta'.

Por su parte, Eduardo Nájera firmó por 12 millones de dólares y 4 años. Con una peculiaridad: el contrato será decreciente (recientemente hemos visto un caso similar en la 'offer sheet' que le han firmado los Warriors a Turiaf, aunque en su caso con otras intenciones). Cobrará 3.4 millones de dólares y el primer año e irá descendiendo (3.1 el segundo, 2.8 el tercero) hasta los 2.6 'kilos' del último año, de tal forma que su fichaje no complica la futura maniobrabilidad salarial del equipo.

El mexicano es uno de esos jugadores cuya presencia acaban agradeciendo los aficionados. Un jugador sacrificado y con pelotas (con perdón). Sin embargo, la gran cantidad de jugadores que tienen los Nets en su posición hacen cuestionar la utilidad de esta adquisición.

Algo más útil podría resultar Jarvis Hayes. En su caso, tan sólo ha firmado por dos temporadas. 4 millones en dos años, repartidos a razón de poco menos de dos millones el primero y poco más de la misma cantidad el segundo. Primera temporada fija y segunda parcialmente garantizada. Llega para ser suplente de Bobby Simmons.

viernes, septiembre 07, 2007

Juicio sumarísimo de regreso. Parte primera.

Los Atlanta Hawks han visto cómo Esteban Batista, su particular jugador-peluche, no sólo hacía buen campeonato en el Preolímpico, sino que incluso les ponía las pilas a los nuevos USA-Boys. Agente libre, y con un GM incauto donde los haya... ¡Por Dios, que alguien le quite la pluma!

Kevin Garnett se machaca con Joe Abunassar (desde Chauncey Billups a Tayshaun Prince, pasando por Corey Maggette, Baron Davis y un largo etcétera). No se le caen los anillos. Porque no tiene.

James Posey
ha sido suspendido un partido por conducir bajo los efectos del alcohol. Ha anunciado que recurrirá. ¿A la bebida?

Contratan además a Glen Davis y sólo queda pendiente Gabe Pruitt.

- Señores, Saras no vendrá, pero presentamos en sociedad a... ¿Te llamabas...?

Charlotte renueva por un año a Jeff McInnis y se debate entre Alan y Derek Anderson para cerrar la plantilla. Que a estas alturas haya dudas...


A
Rodman ya no le quieren ni en Australia. ¿Para cuándo afrontar que estás acabado, Dennis?


Ya han salido los rumores apuntando que
Pavlovic y Varejao están cerca de renovar. Si llego a saber que mi artículo iba a tener esta repercusión, me aprovecho del tráfico de influencias.

Allan Houston, Dikembe Mutombo y Alan Anderson, entre los nombres barajados. ¿Es que nadie les ha dicho que a LeBron le quedan 3 años de contrato?

En Michigan, la única noticia es la lesión de tobillo de Tay Prince en el Preolímpico. A veces la mejor noticia es que no haya noticias.


El juzgado ha retrasado la fecha del juicio de Jamaal Tinsley y Marquis Daniels por la pelea del bar. Ni por estas conseguirán librarse de Jamaaaaal.

Al parecer, esperaban de Jonathan Bender algo similar a lo que hoy día es Kevin Durant. Omitiré comentario alguno al respecto porque Bender me caía bien.

Shaq se va a divorciar y Riley se preocupa. ¿Qué has hecho, Pat?

Por lo que no se preocupa es por Dorell Wright. Aún no ha mostrado interés en renovarle y, de ser así, el verano que viene sería agente libre restringido. Tener 30 años en Miami no está bien visto.


Los Bucks por fin consiguieron firmar a Yi Jianlian. Las malas lenguas dicen que le han prometido 20 minuto por partido.


-
Te prometemos un minuto por cada año que tengas.

-
¿Aún no te han contado que es verdad que tengo 23?

Charlie Bell podría acabar en Europa, según su agente. ¿Otro tirándose el rollo con el Olympiakos?

Los Nets han firmado a Malik Allen. Hassan Adams manda recuerdos... a vuestra * madre. Thorn, Frank, Frank, Thorn.


Stephon Marbury afirma que está "cuerdo, sobrio y feliz". Alguien quiere que pongamos de nuevo el video.



Samuel Dalembert por fin debutó con Canadá. Termina el torneo con una fractura por estrés en su pie izquierdo. Sentirse útil fue un impacto demasiado grande para él.


Colangelo, satisfecho por el compromiso de Garbajosa. Y por el seguro también, picaron.



Andray Blatche ha accedido a acudir a un seminario de reforma para "puteros". Demasiadas cosas pasan por mi cabeza como para quedarse con una.


Dejamos las malas noticias para el final. Porque nunca queremos darlas. La policía confirmó los peores presagios y el cuerpo inerte que se encontró flotando en las aguas del río Delaware era el padre de Jameer Nelson. D.E.P.

sábado, agosto 18, 2007

Los New Jersey Nets ya tienen a su hombre parche.

Y ése no es otro que Robert Hite, que tan buenos recuerdos ha dejado en las noches de Florida.

Tras la marcha de Eddie House a los renacidos Boston Celtics, los Nets andaban a la caza y captura de otro escolta. No parece que hayan tenido mucha suerte, visto lo visto.


Tampoco él puede alardear de ser el hombre más afortunado del mundo, pues ha firmado un contrato de un año por el mínimo, que en su caso son algo menos de 700.000$. Además, el jugador está sólo parcialmente garantizado, de tal forma que si deciden cortarle antes de comenzar la temporada, sólo tendrán que pagarle 20.000$.


Hite, que el año pasado jugara en los Miami Heat, disputó unas más que discretas ligas de verano con los New Jersey Nets, pero la escasez le ha concedido una segunda oportunidad.


Uno a estas alturas se pregunta si de verdad hubiera costado tanto retener a Hassan Adams. Le cortaron por razones de salary cap, pero Hite les coloca ahora en la misma situación.


¿Comenzará la temporada con el equipo?

lunes, julio 16, 2007

Clases de punto y confección. Jamaal Magloire a los Nets.

Tiempo de muchos cambios en New Jersey. Unos llegan, otros se van y no menos son despedidos. Con la franquicia debatiéndose entre la delgada línea que separa la tranquilidad del impuesto de lujo, cualquier movimientos por nimio que sea adquiere una gran importancia. De momento, pasan el examen con nota.

En estos días de sol y playa, la batalla por la zona se libra en los despachos. New Jersey es una de las franquicias que tiene un enorme punto rojo señalando esta necesidad. Con los vecinos pavoneándose de la nueva pareja de hombres altos al otro lado del río Hudson, la situación obligaba a hilar muy fino. El resultado no podría haber sido mejor ni haciendo encaje de bolillos, de tal forma que por el mismo precio que hubieran pagado por un ala-pívot de rotación han conseguido un pívot que en su día alcanzó galones (no del todo merecidos) de All-Star.


Precisamente ahí está la trampa de todo este asunto. En la condición de ex. El canadiense llega de un año decepcionante en Portland y consigue en New Jersey una nueva oportunidad de jugar bajo el síndrome del expiring contract: 4 millones de dólares por esta temporada. Sólo un año firmado y sólo una temproada para volver a ganarse el cielo. Durante la campaña pasada en Oregon apenas se vio a un pívot indolente, falto de motivación y con cierto tufillo a jugador a vueltas de todo.

Si Jason Kidd consigue recuperar a Magloire para la causa, los Nets habrán sumado a precio de saldo un pívot con capacidad reboteadora y cierta facilidad ofensiva que vendría a completar junto con el propio Kidd, Vince Carter, Richard Jefferson y un Nenad Krstic que volverá tras su larga lesión, un quinteto de auténtico lujo.

El banquillo seguirá fallando, pero el salary cap es igual de cruel para todos.

Por esa misma razón tuvieron lugar los otros movimientos de la franquicia. Con apenas 500.000 $, los Nets solucionaron el buyout de un Clifford Robinson que ya parece muy cercano a su despedida. Además, cortaron al alero Hassan Adams. De haber permanecido en nómina pasado el 15 de julio, el rookie habría renovado de manera automática por cantidades cercanas a los 700.000 $. Con Antoine Wright en la plantilla, poco nuevo podía aportar al equipo.

Con estos cambios, los salarios de los New Jersey Nets ascienden a 68.5 millones. Tras la última revisión, el límite para el impuesto de lujo se sitúa en los 67.8 millones.

¡¡Más aguja e hilo!!

miércoles, julio 04, 2007

Draft de una noche de verano. Capitulo XVIII.

New Jersey Nets. ¿Tapando? Brechas.

Finalmente, no pudo ser. Los New Jersey Nets eran uno de tantos equipos que trabajaban con afán los días previos al draft para conseguir hacerse con una superestrella descontenta (curioso, cuando ya tienen a una plantilla). Tanto en los rumores por Jermaine O'Neal como por Zach Randolph, la moneda de cambio principal era siempre la misma: Richard Jefferson. Fracasados todos los intentos, los Nets añadieron en el sorteo de novatos una pieza más a su juego interior.

Como si, de alguna forma, pretendieran sustituir la cantidad por la calidad, se decidieron por un jugador con un perfil que les resultará familiar: Sean Williams. Pívot de corte defensivo. Buen reboteador. Intenso. ¿Josh Boone? ¿Jason Collins? ¿Mikki Moore? Y ahora un cuarto. Si hubiera que elegir un jugador de entre todos ellos con el que guarda una mayor similitud, casi con toda probabilidad ése sería Mikki Moore. Muy activo, incapaz de aportar en ataque más allá del mate. Decente reboteador. Peleón. Y, eso sí, una gran capacidad de intimidación. Sale de Boston College habiendo promediado la pasada temporada 5 tapones por partido y consiguiendo incluso un triple-doble gracias a ellos.


En su debe, los dedos que le señalan como el jugador de la camada con más posibilidades de acabar con problemas de drogas. De hecho, fue expulsado del programa de su universidad y tuvo que pasar 90 días en un centro de desintoxicación en Houston.

En resumen, viene a engordar la nómina de pívots defensivos de una franquicia que no se cansa de soplar y soplar a ver si por fin suena la flauta.

NOTA: 5

domingo, julio 01, 2007

Air Canada podrá seguir operando en New Jersey.

Un día después de haber ejecutado la cláusula de su contrato que le permitiera salir a la agencia libre, Vince Carter parece haber llegado a un acuerdo para continuar su andadura como jugador de los Nets durante los próximos cuatro años.

Durante la tarde de ayer, Vince Carter decidía ejecutar la opción ETO (Early Termination Option) de su contrato, rechazando la posibilidad de cumplir el último año, que le hubiera reportado algo más de 16 millones. Este Opt-Out, que ya han decidido ejercer durante lo poco que llevamos de verano, jugadores como Chauncey Billups o Rashard Lewis es definido como un mero formalismo, una decisión del jugador que no tiene por qué significar su desvinculación total del club.

En muchos casos, representa la intención por parte del jugador de hacerse, o bien con un contrato más cuantioso, o bien con uno de mayor duración. Parece claro que la decisión de Vinsanity ha llegado influida por esta última posibilidad, puesto que renovar un año más tarde podría haber dañado sus pretensiones económicas.

La noticia no pilló de sorpresa a la organización de los Nets que, en palabras de Rod Thorn, esperaban ya que Vince Carter tomara semejante decisión.

“We fully expected Vince to exercise his option”

El entorno del jugador, tampoco daba razones para la intranquilidad.

“Vince is definitely happy in New Jersey and I don’t see any reason why he won’t be back,” said one person close to Carter. “The [opt out] was a formality.”

Tanto que, según afirma hoy el Newark Ledger-Star, el acuerdo ya se habría cerrado verbalmente. Al parecer, los términos del contrato estarían próximos a los 62 millones de dólares a cobrar durante las próximos cuatro temporadas, incluyendo una opción por parte del equipo para una quinta opcional. 16 millones al año para un jugador que aún los merece.

El traspaso permite, a priori y hasta que un traspaso los separe, mantener al Big Trio de los Nets. Sin embargo, con esta firma, la franquicia se colocaría en el límite de luxury tax a falta de la renovación de Mikki Moore, impidiendo la posibilidad de hacerse con un interior de garantías de cara a la temporada

lunes, abril 09, 2007

Fire Frank. Lanza la piedra y esconde la mano.


Esto de Internet da lugar a la aparición de las más variopintas iniciativas. Una de las más curiosas es la iniciada por un grupo de aficionados de los Nets que, hartos de la escasez de mayores resultados, han iniciado una especie de moderno Muro de las Lamentaciones sobre el que verter toda su desgracia. Sin embargo, los preceptos cristianos no funcionan al completo y pese a no estar libres de pecado, todos tirar su particular piedra.

El lapidado, como siempre, el entrenador. Lawrence Frank. ¿Hasta qué punto el doble trasatlántico de Wayne Rooney es culpable?
Cierto es que compartir división con Boston, New York y Philadelphia supone una invitación a entrar en los Playoff como “cabeza de serie”. Pero de la misma forma que han tomado conciencia del mal momento por el que pasan sus compañeros de división (salvo los extranjeros Raptors), deberían haber tomado conciencia de los problemas por los que ha atravesado su equipo.

Es inevitable hacer referencia a la morfología de una plantilla que aparece construida sobre 3 grandes pilares exteriores, mal acompañados por una comparsa en la que el que no está lesionado es joven y de entre los que no responden a ninguno de estos dos mandamientos, apenas hay alguno (la defensa de Jason Collins y la intensidad de Mikki Moore) del que pueda sacarse algo.

Quizá cuando Nenad Krstic cayó lesionado para toda la temporada, alguien tendría que haberse ocupado de acortar los horizontes de una plantilla que, pese a la escasa profundidad, en el Este habría hecho mucho más ruido. Quizá cuando Richard Jefferson comenzó a tener problemas en su tobillo por una mala caída (se ha perdido 30 partidos, recaída incluida), alguien tuvo que avisar de que la sorpresiva "explosión" de Bostjan Nachbar no sería suficiente para mantener el tipo. Quizá, y sólo quizá, los propios aficionados deberían haberse dado cuenta de que con un juego interior en el que el jugador más talentoso en ataque se llama Mikki Moore, las aspiraciones son mucho más cortas.

Al menos, es de recibo reconocer las amargas quejas que apuntan directamente a las exóticas rotaciones de Lawrence Frank como una de las causas del bajo rendimiento del equipo. Y es que raros son los jugadores de banquillo que han recibido minutos de forma regular a lo largo de la temporada. Bostjan Nachbar, Hassan Adams y Antoine Wright han ido viendo cómo su puesto en las rotaciones del equipo variaba de la noche a la mañana sin que las causas que sustentaran el cambio hayan sido descifradas. En el juego interior, y pese las enormes limitaciones, ha preferido utilizar por sistema aleros en el puesto de ala-pívot, jugando de esta forma con cuatro abiertos sin haber en la plantilla ningún tirador consistente. Josh Boone, cuyo entendimiento con Jason Kidd y su compañero de universidad, Marcus Williams, ha resaltado durante las últimas semanas (pese a ser otro jugador limitado en ataque), vio una vez recuperado de su operación de hombro que el hueco para él en la rotación era mínimo.

Otro de los aspectos en los que el entrenador nativo de New Jersey ha resultado "demoledor" este año, ha sido en la habilidad para rematar los partidos. Y es que si los partidos sólo tuvieran 3 cuartos, probablemente los Nets lucirían mejor récord.

Hasta en 13 ocasiones, los Nets han tirado en el último cuarto el trabajo realizado hasta el momento.

En los partidos decididos por 3 o menos puntos, presentan un balance de 3-8.

De las 7 ocasiones en las que los Nets se han jugado la última canasta del partido, tan sólo en dos fueron capaces de convertir el lanzamiento.

Ante semejante tesitura, comienzan a salir a la palestra nombres como los de Rick Adelman (de estilo radicalmente opuesto al actual) o el mismísimo Mark Jackson, que actualmente actúa como analista en los partidos de los Nets de la YES Network junto al legendario Marv Albert (haciendo lo propio durante los pasados Playoff para la ABC) pero no cuenta con experiencia en los banquillos.

Si bien despedir a Lawrence Frank en una temporada en la que las lesiones han sido el principal lastre del equipo sería un golpe bajo, quizá sea momento elegido para empezar cuenta nueva, en el mismo verano en el que Vince Carter puede salir y a las puertas de un relevo generacional y una mudanza a Brooklyn proyectada para 2008.

En su primer año batió el récord de victorias para un entrenador debutante en la NBA (y de cualquiera de las 4 grandes ligas profesionales de Estados Unidos) con 13 triunfos. En el segundo, ganó 14 de los últimos 18 partidos para conseguir el pasaporte a la postemporada. En su tercera temporada, la pasada, estableció el récord de victorias consecutivas de la franquicia con una racha de 14 en el último mes de competición. Este año, primero con balance negativo y con su única referencia interior lesionada, su banquillo es uno de los más calientes de la liga.

La cultura de la victoria sigue su imparable curso.

domingo, noviembre 12, 2006

El partido de Cuatro. New Jersey - Miami.

Un partido con las bases muy asentadas, sin demasiadas sorpresas para el espectador que había preparado el partido. Duelo de bases, duelo de anotadores, unos apuntando a la pintura, otros haciendo daño desde lejos.

El duelo de anotadores correría a cargo de Vince Carter y Dwyane Wade. Tras el desastroso Mundial, el vigente MVP de las Finales se ha decidido a demostrar que su tiro no es tan deficiente. Lo hace, además, utilizando un recurso en absoluto desuso: el tiro a tabla. Con los dedos de una mano pueden contarse los hombres altos (al fin y al cabo es un recurso propio de ellos) capaces de utilizarlo. En la reanudación se encargó de liderar la reacción de su equipo: canastón a aro pasado, robo por detrás, contraataque y asistencia para canasta fácil de Antoine Walker (muy atento en defensa, por cierto) y canasta sobre la bocina tras gran defensa local y peor ataque visitante fueron algunas de las acciones más destacadas hasta conseguir con el 60-59 la que sería la primera ventaja de su equipo. Vince Carter, por su parte, comenzó el partido anotando la mitad de los puntos de su equipo sin fallo, y tuvo que cortarse con el tablero en una mano para volver a enchufarse en el partido. Sus 7 puntos en el último minuto de nada sirvieron. La derrota de su equipo ya estaba servida en bandeja.

Jason Kidd y Gary Payton volvían a verse las caras. De pequeño, en esa fuerte amistad asentada en Oakland, Payton era el que le robaba (literalmente) los balones a Jason Kidd. Ahora las tornas han cambiado y, pese a que ambos afrontan el ocaso de sus carreras, el de los Nets lleva mejor esta veteranía. Como grandes amigos, se repartieron el protagonismo. La primera parte se la llevó Kidd, que a base de rebotes ofensivos, transiciones rápidas y pases de canasta iba cimentando lo que parecía ser un nuevo triple-doble (muy poquito faltó para ello). Suya fue la responsabilidad de echarse el equipo a la espalda tras la lesión de Richard Jefferson. En la segunda, la sorpresa llegó con la buena actuación de Gary Payton en el tiro exterior, ayudando a mantener a los Heat en el partido primero, echando tierra de por medio después.

En un ejercicio de síntesis avanzada, juntaremos ambos factores en 15 segundos de partido. Porque yo lo valgo. A falta de un minuto para finalizar el tercer cuarto, y con 73-71 en el marcador, Dorell Wright recibió un tapón a manos Marcus Williams (partido gris de ambos), Jason Kidd se hizo con el rechace defensivo, salió al contragolpe como alma que lleva el diablo y, tras un sensacional amago a la derecha, finalizó con un 2+1 para empatar el partido a 73. Siguiente jugada, Wade va directo al grano. Ataca la canasta sin que Antoine Wright pueda hacer nada salvo desestabilizarlo. Esfuerzo en vano, puesto que, como nos tiene acostumbrados, fue capaz de rectificar en el aire y sacar un 2+1 que volvía a poner a los Heat por delante en el marcador.

Las fortalezas y debilidades de cada equipo hicieron acto de presencia, pero no de la forma más esperada. Cumpliendo con el guión establecido, 92 de los 106 puntos anotados por los New Jersey Nets llegaron gracias a su juego exterior, donde Antoine Wright sigue reivindicándose tras un año en el más completo ostracismo. Nunca es tarde si la dicha es buena y, además de los 16 puntos con buenos porcentajes, será el encargado de suplir la baja de Richard Jefferson. Miami apuntó donde más le duele a los Nets y cargó balones continuamente sobre un O'Neal tristemente desacertado. Hasta ahí todo normal. Lo que nadie esperaba era la irrupción del factor Haslem: los tiros de media distancia siguen sin entrar, pero en las cercanías del aro mostró una efectividad hasta ahora nunca vista. Con sus 28 puntos (gran serie de tiro) marcó su mejor registro anotador en la liga. Él, y la imposibilidad rival de parar a un interior limitado de cara al aro, acabaron por decantar el partido para los vigentes campeones.

viernes, octubre 20, 2006

La Previa. New Jersey Nets.


En el momento de redacción de esta entrada, Jay Williams aún no había sido cortado. Lo ha sido después, el día 22. El sueño de la NBA se trastocaba así para él. Es de esperar que permanezca en algún equipo de la NBDL para no salir del radar de la máxima competición, pese a que aquí todos sepamos que Europa le resultaría fácil encontrar su sitio. Máxime cuando es época de que los primeros americanos frustrados caigan. Aún y todo, los Nets se han reforzado a conciencia en un verano que difícilmente podría haber ido mejor para ellos.

De robos y desheredados también se vive.

Excepcional draft de rookies para los New Jersey Nets. Uno sale con la idea de que consiguieron todo cuanto tenían en mente y de una calidad superior a la previsible por las posiciones que tenían. Con el número 22 eligieron a uno de los grandes incomprendidos de este draf, Marcus Williams. Mejor dicho, incomprensible, imposible entender cómo un jguador que apuntaba (y merecía) al Top10 acabó cayendo más allá del pick 20. Cierto es que la suspensión del verano pasado por robo y venta de material informático de la universidad es un hecho a tener en cuenta, pero bases puros de semejante calibre no acostumbran a salir todos los años. Seguidamente, con el 23, fue elegido Josh Boone, su compañero en los Huskies campeones de la NCAA en 2004 con los Okafor, Gordon y Villanueva. La fragilidad defensiva en el interior de la zona net empieza a ser un hecho que clama al cielo. Para ello fue elegido Josh Boone. Pese a ser uno de los predilectos de Andrés Montes (¿En qué estará pensando ahora Luke Schenscher?), no parece una mala elección. Intimidación y dureza era lo que faltaba. Como el talento en ataque ya lo ponía Krstic, no meteré el dedo en la llaga. Con el número 54, uno de los desheredados de la camada, el escolta de Arizona Hassan Adams. ¿Y por qué estos términos? Digamos que se ganó a pulso caer tan bajo. De caer tan bajo, es de lo que trata la cosa: en su último año universitario fue detenido en tres ocasiones. Exceso de velocidad, conducción en estado de embriaguez y desacato a la autoridad en una pelea universitaria fueron sus méritos para ser suspendido por los Wildcats. Una lesión durante los workouts hizo el resto.

En la agencia libre, tan sólo tímidos movimientos. Mile Ilic, pívot serbio que fuera segunda ronda el año pasado, firma por fin contrato con la franquicia. Campeón de la Liga Adriática y partícipe de la decadente selección serbia son los últimos logros de este center con buena mano. El desequilibrio de la rotación interior frente al potente juego exterior empezaba a ser escandaloso. En la misma línea se sitúa Mikki Moore, antiguo MVP de la liga de desarrollo y eterno cierre de plantillas. El refuerzo de mayor renombre llegó, sorpresa, en el juego exterior: un temporero de éxito, Eddie House. Poderío anotador desde el banquillo para que no decaiga la fiesta, los Nets cierran así un banquillo exterior de verdadero lujo. El último movimiento intentado fue el de colocar a Jeff McInnis en los Heat. Cuentan las malas lenguas que la actitud de Jeff durante la temporada pasada tras su lesión de rodilla no gustó en absoluto a Lawrence Frank, que lo ha sentenciado. Comprar su contrato o colocarlo a precio de salvo, son las opciones que se barajan.

Al poker le sigue faltando el joker.


Jason Kidd rodilla en ristre continúa siendo uno de los bases más efectivos de la liga. Le cayó un regalo del cielo con sus compañeros de contraataque y con ellos nos hará disfrutar hasta el día, cada vez más cercano por físico y edad, de su retirada. Sea como sea, la franquicia ya le ha encontrado sustituto natural: Marcus Williams. Su nivel estratosférico en las ligas de verano ya ha hecho olvidar sus problemas extradeportivos y parece anunciar la llegada de uno de los próximos grandes bases de la liga. Jeff McInnis, salvo cambio brusco de su situación, parece destinado a pasar horas en el banquillo. Vince Carter, nacido para jugar con Jason Kidd (olé Florentinato), vive una segunda juventud tras dejar patente en Toronto su terrible falta de profesionalidad. Eddie House era el destinado a mantener el ritmo en los ratos libres, pero su reciente operación en la rodilla izquierda lo mantendrá alejado de las canchas durante un tiempo aún por determinar. Este hecho abre la puerta a un Antoine Wright que, tras pasar un año en la más absoluta frustración, viene pisando fuerte. Richard Jefferson, el tercer magnífico, luchará por ganar en protagonismo dentro de la sociedad de armas. A falta de mejor sustituto, Bostjan Nachbar parece que será el depositario de su descanso. Al menos hasta la vuelta de Eddie House obligue a buscar acomodo a Wright. Sí, parece que Lawrence Frank se permite el lujo de dudar entre ambos. La llegada de Josh Boone preveía un descenso de los minutos de Jason Collins, pero prefirió unirse al club de los que verán los primeros meses de liga regular por la tele. Seguirá, por tanto, el gemelísimo, aportando oficio atrás. Cliff Robinson, cuarentón cumplidor como siempre, apurará sus últimos destellos de clase. Las circunstancias obligaron en su día a Nenad Krstic a destacar entre la mediocridad del juego interior. Tras el año de confirmación, toca seguir creciendo. Este año tendrá la compañía de Mile Ilic, de quien ya andan esperando una contribución parecida. Mikki Moore, como de costumbre, apuntalará el invento.

Pronóstico:

La División Atlántica no es nueva para nadie. Por todos es sabido el escaso nivel reina por aquellos parajes. Pese a ello, no sería justo restarle méritos al equipo, que al excelente plantel con el que ya contaban han añadido 3 prometedores rookies y un temporero de lujo. Nivel de sobra para, al menos, dar la cara hasta las Semifinales del Este.

martes, noviembre 01, 2005

Calentando motores. División Atlántica.


BOSTON CELTICS. JUVENTUD AL PODER

El proceso de reconstrucción de un equipo siempre es duro, muy complicado. Cuando ese proceso se alarga durante casi dos decenios y tiene visos de continuar así más tiempo, la situación a veces se torna en insoportable. Pero afortunadamente, no parece ser éste el caso de los aficionados verdes, que siguen al pie del cañón con su equipo, confiando en jóvenes promesas y añorando los tiempos mejores. De cara al esta temporada, que punto esta de comenzar, se presentan con las sensibles bajas de jugadores como Antoine Walker y Gary Payton, y las novedades de jugadores jóvenes como Dan Dickau y los rookies Gerald Green, Ryan Gomes y Orien Greene. Y, mientras tanto, persisten aún los rumores acerca de la posible marcha de Paul Pierce. De Portland a Clippers pasando por Denver, durante este verano se le ha colocado en varios equipos y, lo único en que todos coinciden es en que el escolta abandonará el barco. Si a esto le añadimos la implicación de Tony Allen en un intento de homicidio, es fácil pensar que la temporada se hará larga.

Quinteto titular:

Con la única duda del tiempo que tardará Al Jefferson en quitarle el puesto de titular a Mark Blount, los verdes se presentan con un quinteto sensiblemente inferior al que terminó la temporada. Delonte West sigue su conversión a base por buen camino, aunque el año pasado no terminó de convencer. La llegada de Dickau podría ponerle sobre aviso si no da resultados. Su gran temporada en los Hornets parece haber sido suficiente aval. Paul Pierce, a expensas de poder resolver su futuro cuanto antes, seguirá siendo el principal referente del equipo. Ricky Davis, ante la ausencia de un alero de mejores cualidades, parece que subirá al status de titular tras haber sido uno de los mejores sextos hombres. Mark Blount seguirá recolectando el cariño de la afición céltica con su apasionante entrega y trabajo (nótese el tono irónico utilizado por un servidor durante la frase) mientras que Raef LaFrentz, correcto sin más, seguirá siendo necesario hasta que llegue o surja alguien mejor.

Banquillo:

Acusada juventud. El quinteto suplente, de darse un par de circunstancias no muy complicadas, podría alcanzar una media inferior a los 23 años. Mientras que Dan Dickau (gran temporada, pero en un equipo como los Hornets) y Marcus Banks luchan por un puesto… esta vez de suplente, Tony Allen tendrá que resolver sus problemas con la justicia (no se espera que vaya a más), Gerald Green deberá soportar la terrible presión que supone ser la gran esperanza de toda una afición, Al Jefferson (que apunta muy alto, sí) deberá cuidar su falta de concentración (demasiados problemas de faltas) y su dificultad para moverse en defensa si quiere salir adelante y Kendrick Perkins tendrá que luchar por una oportunidad en un juego interior que no es nada del otro mundo. Mucho caos en el banco, donde pocas cosas son seguras: Orien Greene apunta a la D-League, Brian Scalabrine, con 26 años parece viejo entre tanto joven y Ryan Gomes ha hecho una muy buena pretemporada. Trabajito por delante, Doc.

Pronóstico:

Temporada larga y difícil la que se avecina en Massachussets. Demasiadas promesas y pocos “proyectos hechos” en la plantilla. Este año toca sufrir, pero al menos parece que en los draft hay acierto.



NEW JERSEY NETS. TRÍO DE ASES

La temporada pasada, la desgraciada lesión de muñeca que sufrió Richard Jefferson nos impidió apenas disfrutar de uno de los mejores juegos exteriores más espectaculares de los últimos años: una mente prodigiosa con dos artistas del aire a su servicio. Y es que si Jason Kidd se quejaba amargamente tras la marcha de Kenyon Martin, ahora puede estar contento con lo que le han regalado. Sin bajas sensibles en la plantilla, la llegada de Marc Jackson apuntala el juego interior (buen pretemporada la suya), mientras que hombres como el inclasificable Jeff McInnis, Scott Padgett o el rookie de Texas A&M Antoine Wright, llegan para fortalecer y dar refresco al peligro exterior

Quinteto titular:

Temible equipo titular con el que se presentan de cara al nuevo curso. Kidd, uno de los mejores bases de la competición y el más completo de todos ellos aspira a mantener la línea de su producción, donde no faltarán a buen seguro los triples-dobles. Vince se presenta ante el más difícil todavía: repetir lo del año pasado. Y es que tras el traspaso y en sólo media temporada, superó la barrera de los 30 puntos en cerca de 25 ocasiones. Muchos son los que lo acusan de haber rendido por debajo de sus posibilidades en ese comienzo de temporada (muy probable, por otra parte) pero su status de superestrella se mantendrá intacto. Jefferson deberá alejar el fantasma de su lesión a base de juego, algo que nadie pone en duda pero que todos esperan por el bien del espectáculo. No habrá problemas. Por su parte, Cliff Robinson y Marc Jackson se disputarán la titularidad, mientras que Nenad Krstic jugará con la tranquilidad de quien se ganó un puesto a base de trabajo y buen juego, en un año en el que sorprendió a propios y extraños.

Banquillo:

No es precisamente uno de los banquillos más completos de la liga, pero es algo en lo que la franquicia ha estado trabajando durante el verano. Zoran Planinic, que nos hizo sufrir durante algunos minutos en el Eurobasket, y Jeff McInnis, serán los encargados de dar oxígeno a un veterano Jason Kidd. Hombre como Antoine Wright (de momento no muy acertado en sus primeros pasos), Scott Padgett o Lamond Murray completarán el backcourt suplente. Por dentro, bien Cliff o bien Jackson supondrán un punch extra desde el banquillo, mientras que Jason Collins aportará la intendencia necesaria.

Pronóstico:

Con un quinteto así y estando en la desmejorada Atlantic Division, no parece complicado que se cuelen como primeros de división en. Lo que pocos pueden poner en entredicho es su presencia en Playoff.


NEW YORK KNICKS. TIEMPO DE OBRAS EN BROADWAY

Cuando Larry Brown decidí dejar el banquillo caliente y cómodo de Michigan, comenzaron a saltar las especulaciones: unos apuntaban a una posible retirada, aludiéndola a problemas de salud... y a la edad, que no perdona. Otros, la inmensa mayoría, daban por hecho su llegada a los Cavaliers para desempeñar el papel de director deportivo, una posibilidad que aunaba la retirada del fragor de los banquillos con el indudable atractivo de construir un equipo en torno a LeBron. Y, detrás de todos ellos, rumores que le situaban como uno de los nombres barajados para el banquillo de la Gran Manzana. Pero no, eso es imposible, los Knicks no son un "Equipo Brown". Y no, no lo son, pero esta vez gano el romanticismo: "El baloncesto empezó para mi en esta ciudad, y en ella quiero que acabe". El decidió, y ahora le toca hacer de los Knickerbockers un equipo competitivo... bueno, de momento, hacer un equipo. Porque si algo se ha visto durante esta pretemporada, era la falta de ese concepto colectivo en su juego. Mucha tela tendrá que cortar el vejete para acondicionar el equipo. Marbury, Crawford y Richardson son los primeros candidatos a ser aleccionados, no tardará en buscar gente más obediente (tanto es así que solicitó el fichaje de Eric Snow), pero durante este mes de calentamiento ha ocurrido algo que le pondrá en un aprieto: los rookies lo están haciendo bastante bien. ¿Hará como con Milicic?

Quinteto titular:

Stephon Marbury no cumple con el perfil de “base Brown”, ni mucho menos. Otros jugadores a lo largo de la trayectoria en los banquillos de Larry B sufrieron su estrictez: Allen Iverson pasó a jugar de escolta, mientras que Chauncey Billups tuvo que dar un pequeño giro a su juego. La verdad es que a ninguno de ellos les fue nada mal tras el cambio pero ¿será el caso de Steph? Poco probable. El autoproclamado mejor base de la liga (los hay que no tienen abuela) posiblemente seguirá en su posición, aunque más de un toque de atención recibirá seguro. Jamaal Crawford y Quentin Richardson se perfilan como los grandes quebraderos de cabeza para el entrenador. No en vano, entre los dos se jugaron la temporada pasada la nada despreciable cifra de 1143 triples mientras que los Pistons en su conjunto, tan sólo llegaron a los 1053. Tendrán que arreglarse ese resorte en la muñeca. En la posición de ala-pívot tendrá que elegir Antonio Davis y Malik Rose, trabajadores natos. Ahí no habrá sorpresas. Como pívot, Eddy Curry, cualquier otra opción le pondrá seriamente en evidencia. El trabajo nunca ha sido el fuerte de Eddy, pero su rendimiento este año está lejos de toda duda. Esperemos que el corazón no le dé más problemas.

Banquillo:

Nate Robinson se perfila como gran proyecto de futuro, pero estando Marbury por delante, se antoja imposible la titularidad. Hardaway está disfrutando de minutos y, de momento y salvo lesión, se espera que así siga. Lo que no es del todo descartable es que Larry dé el campanazo sentando a Crawford o a Richardson a favor de un alero trabajador. En esa posición precisamente es en la que Matt Barnes y Trevor Ariza están proporcionando la gran sorpresa de la pretemporada. Muy acertados ambos en los minutos de que disfrutan, y no se descarta que Trevor, gracias a sus condiciones defensivas, termine la temporada como titular. David Lee, Maurice Taylor, Antonio Davis… por falta de jugadores no será desde luego, aunque resulta especialmente esperanzador el rendimiento del rookie durante los partidos preparatorios. Jerome James y Channing Frye no son, precisamente, duros y consistentes en defensa, pero alguien tendrá que jugar.

Pronóstico:

Larry llegó avisando de que el proyecto no era a corto plazo y que se necesitaba tiempo, por lo que no se esperan grandes resultados de momentos. Sin embargo, para muchos, la reputación de Mr. Brown es un factor a favor. A priori no parecen meter miedo.


PHILADELPHIA 76ERS. BUSCANDO LA QUÍMICA

Cuando a mediados de febrero, se consumaba la llegada de Chris Webber al equipo, saltaban las casas de apuestas, que de repente colocaban a los de Pennsylvania como uno de los grandes favoritos en el Este e, incluso, llevaba a los más acérrimos seguidores a pensar en el trofeo Larry O’Brien. Era otro O’Brien, Jim, quien debía ocuparse de colocar las piezas de lujo de la mejor forma posible para lograr el objetivo. Sin embargo, la chispa entre el anotador más prolífico y el jugador con más clase de la liga, no surgió y el experimento dio al traste. Incluso se rumoreaba que no era precisamente afecto mutuo lo que se tenían. Ahora, todo son piropos entre ambos. De repente, quieren poner de su parte para que surja la química. Quién sabe en lo que puede acabar, pero su entendimiento es esencial para el equipo. La llegada de Maurice Cheeks, hombre de la franquicia y mentor de Allen, también influirá lo suyo.

Quinteto titular:

Gran quinteto el que presentan y muy equilibrado, mezcla de experiencia y juventud y con una extraordinaria pareja interior-exterior. Allen Iverson, exultante con la llegada de Cheeks, cumple 10 años en la liga (y como sixer), por lo que su motivación será si cabe mayor que la que ha demostrado noche tras noche durante todo este largo tiempo. Andre Iguodala (AI2) seguirá perfilándose como un jugador completo y perfecto compañero de Allen para las alturas, Kyle Korver deberá demostrar algo más a parte del hecho de ser un extraordinario tirador de 3. Por su parte, Chris Webber tendrá que hacer todo lo posible para que, con su ayuda, el equipo pueda aspirar a cotar mayores, mientras que Samuel Dalembert será otro de los que tenga que confirmar expectativas después de la renovación de contrato que ha firmado este verano. A crecer toca.

Banquillo:

Situación desoladora la de los recambios que tendrá a su disposición Maurice Cheeks para dar respiro a los hombres importantes. Tan sólo el ex hornet Lee Nailon y el pívot Steven Hunter parecen ofrecer garantías suficientes. El resto, grandes incógnitas. De Louis Williams se han hablado auténticas maravillas, hasta sucesor de Allen Iverson le han nombrado (el propio Allen fue a verle en algún que otro partido), pero con 19 años deberá primero adaptarse a un gran universo que se acaba de abrir ante sus ojos. John Salmons de nuevo se sale en pretemporada, pero en el momento de la verdad siempre pasa lo que pasa. Shavlik Randolph, que pagó su precipitación en el draft, se quedará a verlas venir. Si es que no aprenden, el mejor agente es el de Kevin Ollie…

Pronóstico:

Tratándose del Este, los Playoff estarán como siempre algo más baratos, pero la ausencia total de un banquillo solvente siempre acaba pagándose, tarde o temprano. Las aspiraciones dependerán en gran parte del grado de compenetración que AI y C-Webb sean capaces de alcanzar, pero la progresión de los jóvenes también será determinante. Del banquillo, poco que esperar.



TORONTO RAPTORS. TIEMPO DE BOSH

Primera temporada que los canadienses empezarán sin el que ha sido el mejor jugador de su corta historia, sin el jugador que marcó un antes y un después en toda una franquicia con su llegada. Con semejante situación, lo normal es que aparezca una clara dependencia. La temporada pasada ya lo sufrieron a partir de su salida (aunque lograron salir a flote), y en esta parece que las cosas no irán mucho mejor. El líder del grupo está claro, Chris Bosh, pero el equipo, por una u otra razón, no acaba de encontrar su camino. La novedad más importante es la confianza depositada en José Manuel Calderón, una gran noticia para los aficionados al basket de este país. De momento, la llegada de Mike James parece privarle de la titularidad, pero el cuerpo técnico (y la afición, según indican las encuestas) se muestra encantado con él. Y junto a ellos, dos rookies prometedores: Joel Graham y Charlie “sin cejas” Villanueva. Altas todos ellos que cubren ampliamente la marcha de Donnyell Marshall y el díscolo Rafer Alston.

Quinteto titular:

Mike James de momento está demostrando más resultados a nivel individual que colectivo, pero Sam Mitchell sigue concediéndole la titularidad. El año pasado no lo hizo nada mal en Houston y Milwaukee y cuenta con más experiencia en la liga que Calde, por lo que lo normal es que sea él quien salga de inicio al principio de temporada. Jalen Rose (según las malas lenguas, más fuera que dentro del equipo) aportará la experiencia en un equipo joven, además de ser uno de los encargados de llevar el peso anotador del equipo. Joey Graham será el encargado de apretar las clavijas en ataque gracias a su impresionante poderío físico, aunque en ataque el chaval tampoco es manco. Chris Bosh, como era de esperar y como resulta más que lógico, será el líder del equipo, peso que ya tuvo que llevar durante la segunda mitad de temporada. Preciosos movimientos en ataque, buen tiro… con un poco más de peso no debería tener problemas para entrar en la élite de la liga. Loren Woods parece haberse hecho en los últimos partidos con la posición de titular, aunque la progresión de Araujo (el año pasado se ganó el ostracismo de calle) parece evidente. Los 130 kilos del brasileño ayudarían bastante en la zona.

Banquillo:

Aquí es donde parece que tendremos que ver durante los primeros tramos de temporada a nuestro Jose, más tarde el tiempo dirá, pero de momento, le tocará ganarse el puesto, donde Alvin Williams ha regresado sin demasiado acierto y Tierre Brown no cuenta con continuidad. Mo Pete pasa a baza ofensiva desde el banquillo, mientras que Matt Bonner seguirá demostrando aptitudes desde el banquillo. El que se ha ganado el respeto y admiración de la afición a base de un gran rendimiento es Charlie Villanueva, probablemente el mejor rookie de la pretemporada y la sorpresa más agradable en Canadá. Alternará los puestos de alero y ala-pívot, pero la presencia en su posición natural de Chris Bosh le resta, obviamente, posibilidades de titularidad. A vista de los últimos partidos, parece que Araujo partirá desde el banquillo, sin embargo, sus resultados deberían señalar lo contrario. Veremos como se resuelve el asunto.

Pronóstico:

Temporada difícil para los Toronto Raptors, que parecen estar buscando ya acomodo entre los puestos de lotería del próximo año. Buenos cimientos, pero demasiada juventud.