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martes, julio 29, 2008

Kwame Brown a Detroit, Ricky Davis a Clippers y Nenad Krstic a... Moscú

Siguen los movimientos en este verano de tirones. Cada comienzo de semana asistimos a la confirmación de unos cuantos fichajes, y ya hemos tenido nuestra particular ración. Con sorpresas, como la llegada de Ricky Davis a los Clippers, con incertidumbres, como la que crea Kwame Brown en Detroit, y con noticias anunciadas, como el regreso de Nenad Krstic a Europa. Además, Will Solomon hace el camino a la inversa y regresa a la NBA, mientras que los Sixers contratan a Kareem Rush como tirador.

Los Clippers no paran de moverse desde que comenzó julio. En sólo un mes han lavado por completo la cara de la franquicia y, sobre el papel, han reaccionado bien (salvo el traspaso de Brevin Knight) a las trabas que se han encontrado por el camino. En el penúltimo episodio, han llenado el hueco que iba a ocupar Kelenna Azubuike con el fichaje de Ricky Davis, que llega con un contrato por dos temporadas, la segunda de ellas opcional.

Aunque los términos económicos no se han desvelado, el hecho de que se haya incluido una Player Option indica que el contrato está muy probablemente por debajo del 'caché' del jugador, por lo que las cantidades acordadas podrían no andar muy alejadas de esos tres millones al año que había firmado inicialmente Azubuike. Habrá que permanecer atentos, pues.

Es la oportunidad de Davis para reflotar una carrerea que, si bien nunca fue fulgurante, en su corto paso por Miami ha rozado lo mediocre. Llega a la franquicia angelina con el cartel de anotador desde el banco, de buen suplente para las alas que permitirá incluso poner sobre el parqué una alineación de hombres pequeños, pasando a Al Thornton al puesto de 'cuatro' y practicar un baloncesto más rápido y directo. A pesar de su trayectoria descendente, diremos a su favor que en las últimas temporadas ha experimentado una más que aceptable mejora en el tiro exterior.

El que no tiene que reflotar su carrera es Kwame Brown. Más que nada porque su carrera nunca llegó a estar en la superficie. Lejos quedan los tiempos del número 1 que trataba de explotar en Washington. Con Phil Jackson acabó por convertirse en un interior defensivo muy decente y con tal etiqueta llega a los Pistons. A cambio, percibirá 8 millones de dólares por 2 temporadas, un buen pellizco visto lo poco que ofrece el jugador. El segundo año del acuerdo es opcional, por lo que el verano que viene el jugador podría volver a salir del mercado... y los Pistons librarse del bulto.

Queda lejos de duda que la gestión de Joe Dumars al frente de los Pistons ha sido notable. Sin embargo, este hecho no le libra de poder cometer errores. Aún a riesgo de pecar de atrevido (que no), los de Michigan bien podrían haberse ahorrado el movimiento, puesto que en Amir Johnson ya contaban con un jugador interior intenso en defensa y escaso en conocimientos del juego, precipitado en sus acciones, joven y con un contrato muy similar al de Kwame.

Tras la marcha de Jarvis Hayes, quizá hubiera sido más conveniente centrar su atención en la contratación de un alero suplente de garantías para dar descanso a Tayshaun Prince. A expensas de lo que suceda con la situación de Josh Smith, los Pistons siguen dando continuidad al bloque que les ha hecho fijos en las Finales de Conferencia.

No por anticipada, deja de sorprender. Días atrás hablábamos de la posibilidad real de que Nenad Krstic pudiera acabar jugando en "Europa". En concreto, el Maccabi era el equipo que había mostrado un mayor interés en hacerse con los servicios del jugador. Sin embargo, los petrodólares rusos vuelven a ganar la partida y el pívot serbio jugará las dos próximas temporadas jugará en el Triumph de Moscú a cambio de 3 millones de euros al año, un salario que según la ESPN sería equivalente a unos 9 millones de dólares por año.

Con Krstic ya son dos los jugadores de los Nets que han abandonado este verano la franquicia para cruzar el charco, media Europa, y llegar hasta Moscú. Hasta hace poco, los Nets tenían un exceso de jugadores en plantilla y demasiados interiores. Es curioso cómo sin mover un dedo (y cuando lo han hecho, ha sido para mal), ya tienen el problema resuelto.

Como es habitual en los contratos que están firmando estos jugadores en el Viejo Continente, puede regresar libremente a la NBA al final de la temporada que viene. Por si acaso, los Nets conservaron sus derechos extendiéndole la Qualifying Offer. Y es que lo que parecía ser el comienzo de una carrera prometedora en la NBA, ha quedado en stand-by por culpa de una lesión de rodilla.

Otros que siguen adelante con sus deberes son los Philadelphia 76ers, aunque en su caso les queda lo más difícil. Por el momento, siguen reforzando lo más profundo de su banquillo, esta vez con la llegada de Kareem Rush. Aunque aún no se ha hecho oficial, parece que jugador y franquicia han alcanzado un acuerdo a cambio del mínimo salarial, que en su caso corresponde a algo menos de un millón de dólares al año.

Con un gran proyecto en ciernes, el equipo sólo estaba falto de un buen tirador exterior para redondear la plantilla. Eso es lo que han conseguido con Rush, pero el perfil de temporero que arrastra no se ajusta con el nivel que exige el equipo, muy superior al de la última temporada. Tras un inicio ilusionante en Los Angeles Lakers, su carrera se enfrió hasta el punto de tener que pasar un año en Lituania (formaba parte del Lietuvos Rytas que se enfrentó al Real Madrid en la final de la Copa ULEB) para poder volver a la liga norteamericana.

Así pues, Philadelphia sigue comprando 'trapillos' para su fondo de armario, pero aún quedan dos movimientos fundamentales este verano: las renovaciones de Andre Iguodala y Louis Williams. Del primero depende el salto de calidad del equipo (sin él, los Sixers regresarían al mismo punto en el que estaban la temporada pasada), mientras que el segundo es el único relevo de garantías para Andre Miller, y un buen anotador desde el banco.

Cierra el capítulo de nuevas incorporaciones otro jugador con pasado reciente en Europa, aunque en su caso de vuelos mucho más bajos que los jugadores que protagonizan la emigración de retorno. Will Solomon abandona el Fenerbahce para unirse a los Toronto Raptors. Todos estamos de acuerdo que comenzar tu carrera en los Memphis Grizzlies es un golpe bajo (hola, Pau), por lo que no ha podido ser hasta los 30 años cuando este base ha podido regresar a la NBA.

A falta de mayor atractivo para los agentes libres, los Raptors siguen obligados a mirar a Europa para hacerse con jugadores que puedan ayudar al equipo. Visto el gran acierto que tuvieron con Anthony Parker (aunque con 'el hermano de Candace' era facil), vuelven a repescar a un americano olvidado. En este caso, llega para pelear por el puesto de segundo base con Roko Ukic, e incluso podría llegar a jugar algunos minutos como 'dos'. Desde luego que la competencia para Calderón no va a ser demasiada.

jueves, julio 10, 2008

Calderón recoge los frutos de su trabajo

Las cifras superan incluso las previsiones más optimistas. Eso, o que verlo hecho realidad resulta más impactante. Entre 40 y 45 millones de dólares por 5 temporadas son las cifras que se apuntan como las que ha acabo firmando José Manuel Calderón en su renovación con los Raptors. Premio más que merecido a una temporada en la que se quedó a las puertas del All-Star.

Contar con dos bases con nivel suficiente para ser titulares es una bendición, pero a veces también puede convertirse en un castigo. En este caso, por características de juego, TJ Ford y Calderón no podían compartir presencia en la cancha durante mucho tiempo, lo que obligaba a recortar de forma notable el tiempo de juego de ambos. Y no sólo eso, sino que el debate por la titularidad quedó abierto de par en par esta temporada.

En un encuentro contra Atlanta, TJ Ford sufrió una aparatosa caída tras un golpe fortuito con Al Horford (imposible pensar que aquello fue con mala intención) que le hizo recaer de su ya conocido problema en cuello y espalda. Su ausencia llevó a la titularidad a Calderón que no sólo supo aprovechar la oportunidad, sino que se acabó convirtiendo en uno de los directores de juego más valorados de la liga. Tanto subió el nivel del de Villanueva de la Serena en sustitución del tejano que estuvo incluido hasta el último suspiro en las quinielas del All-Star de Nueva Orleans.

El sueño no fue posible, pero Calderón siguió adelante con su extraordinario nivel de juego. Tanto fue así que, al regreso de Ford, éste tuvo que hacerlo desde el banquillo. Como quiera que TJ no se acostumbró a su nueva situación, Sam Mitchell se vio obligado a devolverle "su" puesto en el quinteto titular en detrimento de Calderón. Si ya había quedado demostrado hasta la saciedad que ambos eran incompatibles (deportivamente hablando), esto acabó por condenar a uno de ellos.

El elegido para abandonar la franquicia no ha sido otro que TJ Ford. Paradójicamente, esta no es la primera vez que se ve en una situación semejante.

Cuando sufrió la otra lesión, quien saltó a la palestra (por entonces en los Milwaukee Bucks) fue Maurice Williams. Tras su temporada de debut en Utah, el base de la Universidad de Alabama recaló en Milwaukee con la tarea de ejercer como sustituto de Ford, que se perdería toda la temporada como consecuencia de la grave lesión que se produjo el año anterior.

El experimiento salió bien. Muy bien. El rendimiento fue inmejorable, y el regreso de TJ la temporada siguiente no frenó la progresión de Williams. Hasta el punto de que se convirtió en prescindible para el futuro de la franquicia de Wisconsin. En el verano de 2006 surgiría la oportunidad de traspasarlo a cambio de Charlie Villanueva, y hasta aquí lo que todos sabemos.

Lo que pocos recordarán es que uno de los candidatos que sonaron para el puesto de base en Milwaukee para la 2004-05 fue... sí, José Manuel Calderón.

La de vueltas que da la vida.

Por fin pudo hacerse oficial. Jermaine O'neal es un raptor

Que no es que le esté llamando dinosaurio, ni quiera sugerir que su carrera también pueda estar camino de extinguirse. Simplemente, quedaba mejor que poner Toronto en el título.

Jermaine O'neal pone rumbo a Toronto Raptors junto con Nathan Jawai, número 41 del último draft, a cambio de TJ Ford, Rasho Nesterovic, Maceo Baston y Roy Hibbert, número 17. El traspaso fue acordado antes de la noche del draft, pero por cuestiones que más tarde explicaremos (y que nada tienen que ver con la apertura del mercado de ayer), no puedo ser anunciado hasta hoy.

Este intercambio trae consigo dos consecuencias que se hacían inevitables: el final del ciclo de Jermaine O'Neal en Indiana, y la salida de Toronto de TJ Ford. El uno obstaculizada la regerenación de los Pacers, equipo en el que se convirtió en uno de los mejores interiores de la liga. El otro sufrió las consecuencias de que los Raptors contaran con la mejor pareja de bases del campeonato.

FIN DE CICLO Y COMIENZO DE NUEVA ETAPA EN INDIANA.

Era un secreto a voces que el paso de Jermaine O'Neal por Indiana había llegado a su fin. La desmembración del proyecto (que podemos situar, como siempre, en la tangana del Palace en 2004) que les había llevado una vez a conseguir el mejor balance de la liga, los continuos problemas físicos que ha sufrido el ala-pívot en las últimas tres tempordas y el cuantioso contrato que aún queda en vigor, hacían inevitable su traspaso.

No en vano, el contrato que firmó el jugador en el verano de 2003, es el segundo más alto que se ha firmado nunca desde la aprobación del convenio colectivo de 1999. Sólo superado por el que firmaría Kobe Bryant un año más tarde, el acuerdo de Jermaine alcanzó nada menos que los 126 millones por 6 temporadas, un exceso del que aún hoy perduran las consecuencias. Con dos temporadas aún por cumplir de ese contrato, al jugador le quedan por cobrar más de 44 millones de dólares, una situación que era insostenible para Indiana y un riesgo que Colangelo ha decidido tomar.

Pero lo que más preocupación debe levantar no es lo económico, sino lo físico. Tal es la situación de los dos jugadores que han co-protagonizado este intercambio, que ambas franquicias exigieron informes médicos antes de seguir adelante con la operación. En el caso de Jermaine O'Neal, los problemas que hoy le traen por la calle de la amargura se remontan a la campaña 2006-07.

Los problemas en la rodilla que izquierda que le lastraron durante esa temporada, le obligaron a someterse a una intervención quirúrgica en abril de 2007. El proceso de convalecencia le obligó a perderse la pretemporada con el equipo y los primeros partidos de liga. Sin embargo, la recuperación no fue todo lo satisfactoria que debió ser, y en enero de este se volvió a resentir.

Lo que parecía una pequeña recaída, sin aparente gravedad, y que le mantedría alejado de las canchas durante tan sólo unas semanas, se acabó extendiendo durante dos meses y medio. Jermaine O'Neal volvió a tiempo para disputar el último partido de marzo, y lo que restaba de abril, cuando su equipo (ya en manos de Danny Granger y Mike Dunleavy) gastaba los últimos cartuchos para conseguir la clasificación para los Playoff.

No sólo no pudo ayudar a conseguir la gesta (hecho en el que debemos conceder también gran parte de mérito a los Atlanta Hawks), sino que acreditó unos números muy alejados de su nivel habitual. Así, en los últimos diez partidos que O'Neal vistión la camiseta de los Pacers, tuvo unos tristes promedios de 10 puntos, 7 rebotes y menos de 20 minutos jugadores por noche.

¿Podrá volver a ser el mismo o simplemente vio obligado a forzar sin estar recuperado para intentar ayudar al equipo?

Pero no sólo de Jermaine O'Neal va el asunto. Jamaal Tinsley es otro de los que lleva tiempo en la picota. En su caso, incluso se han llegado a escuchar rumores de buy-out. Aunque es muy poco probable que los Pacers decidan cortarle, la llegada de TJ Ford sí deja claro que su periodo como jugador de Indiana (único equipo al que ha pertenecido en sus 7 temporadas como profesional) también ha llegado a su fin.

En su caso, se juntan los problemas físicos que ha arrastrado durante este año (rodilla y muslo izquierdos le han hecho perderse más de 40 partidos en la última liga regular) con los problemas con la justicia que ha protagonizado. Esta incertidumbre, junto con su alto salario (le quedan por cobrar 21 millones en tres años) han hecho imposible que Larry Bird pueda encontrarle acomodo en el mercado, pero aún queda mucho verano por delante.

Mientras tanto, los Pacers liberarán el verano que viene algo más de 10 millones de dólares, gracias a Rasho Nesterovic y al regreso de un viejo conocido (también de la afición de Badalona), Maceo Baston, y tendrán a su disposición a Roy Hibbert, un enorme pívot con más calidad de la aparente al que quedarse un año más en Georgetown le ha impedido salir entre los 5 primeros del draft.
TORONTO JUNTA A MAESTRO Y APRENDIZ EN EL CAMPO.

Por su parte, los Raptors dejan de contar con la mejor pareja de bases para reunir a uno de los mejores duetos interiores. Jermaine O'Neal y Chris Bosh formarán un dúo de lujo, aunque también curioso, pues desde que llegó a la liga, el tejano ha sido comparado con el jugador que un día llegó procedente del instituto Eau Claire.

Sin embargo, ni el ex de Indiana tiene la inteligencia de Chris Bosh, ni Bosh cuenta con la capacidad defensiva que una vez tuvo su predecedor. Falta por resolver el estado en que volverá a jugar Jermaine. De hacerlo a un nivel acorde con las expectativas, se trataría sin duda de una de las mejores parejas interiores de la liga. Un duo de gran capacidad anotadora que permitiría además a los tiradores exteriores de Toronto (segundo mejor porcentaje de 3 en la liga el año pasado) disfrutar de más espacios.

Al mismo tiempo, los Raptors resuelven una situación en la que otros equipos desearían verse: contaban con la mejor pareja de bases, dos bases titulares que, además y por características de juego, no podían compartir cancha al mismo tiempo. Los mejores resultados de Calderón y los problemas físicos de TJ Ford, han acabado por decantar la balanza del lado del extremeño que, por si fuera poco, ha firmado una cuantiosa renovación.

BASE-YEAR COMPENSATION. ¿POR QUÉ NO PUDO HACERSE OFICIAL ANTES?

A vueltas con las complicadas reglas salariales que rigen esta liga. El traspaso, acordado antes de la noche del draft, no pudo hacerse oficial hasta ayer por una circunstancia que rodeaba al contrato de TJ Ford: era un Base-Year Compensation Player. ¿Qué demonios es eso? Veamos.

Las reglas de la liga imponen restricciones a la hora de poder traspasar a un jugador recién renovado. así, si la subida salarial con respecto a su anterior contrato es superior al 20% (siempre que no cobrara solamente el mínimo), y la franquicia está por encima del límite salarial, el contrato queda sujeto a lo que se conoce como 'Base-Year Compensation' durante los siguientes seis meses o, en su defecto, antes del 30 de junio, lo que llegue más tarde.
Puesto que la renovación la firmó el año pasado, la condición de Base-Year se mantenía hasta el 30 de junio.

Según esta condición, a la hora de ser traspasado, se tendría en cuenta tan sólo el 50% del actual sueldo del jugador o, en su defecto, el anterior salario, la cifra que sea más grande de las dos. Como todos sabemos, a la hora de hacer un traspaso, debe haber una equivalencia entre los contratos traspasados y los obtenidos. Así, al contar tan sólo la mitad del salario de TJ Ford, el traspaso no podría cuadrar hasta pasado el 30 de junio.

Para que los sueldos cuadrasen, debía tenerse en cuenta el sueldo íntegro de TJ Ford, algo que no podría ocurrir hasta el 1 de julio. Y puesto que el 1 de julio no estaban permitidos los traspasos, se ha tenido que esperar hasta el día 9 para hacerlo oficial.

domingo, diciembre 31, 2006

El partido de Cuatro. Memphis - Toronto.


Empieza el partido y lo primero que llama la atención, por encima de la desangelada afición de Memphis, llama la atención ese entrenador que Michael Heisley y Jerry West se han sacado de la manga. Tony Barone, ya no sólo el aspecto, sino que hasta el nombre le acompaña. Esa pinta de Soprano, esa pinta de mafioso de poca monta de un barrio italiano. Tony el Gordo podríamos llamarlo. Fat Tony.

Ocupe el puesto que ocupe esta pequeña coña en la interminable lista de mafiosos que se han asociado al nuevo head coach grizzly, no debe alejarnos de la gran realidad que descansa tras de sí: es el instrumento del régimen, el encargado de hacer atractiva una franquicia. La Leni Riefenstahl de Tennessee, si se me admiten comparaciones estrafalarias y desacertadas. Ya que se van a perder muchos partidos, al menos que no se pierda mucho público. Es por eso que vimos a un equipo lanzado al ataque, menos encorsetado, con jugadas más rápidas, más espontáneas. Hacía mucho tiempo que no se veían acciones de tiro tan rápidas.

El partido empezó de forma inmejorable. Jorge Garbajosa inauguraba el electrónico y Pau Gasol le contestaba en la siguiente jugada de ataque. No tardaría mucho Calderón en sumarse a la Spanish Party, a ese homenaje improvisado. Una segunda de Garbajosa pondría el broche a ese gran inicio de partido, en el que 4 de las 5 primeras canastas llevaron sabor español. A esa pequeña fiesta vendría a sumarse Alexander Johnson, que en un desaforado contraataque no haría otra cosa que comerse a Jorge Garbajosa, con la consiguiente falta en ataque. El final de fiesta tendría mucho de suspense: mala caída de Pau y la mano al tobillo derecho. Posteriormente sería sustituido por precaución, aunque visto lo visto tampoco fue más allá. No tardaría mucho Garbajosa en volver a sacarle los colores a un grizzly en defensa, provocando una absurda falta en ataque de Hakim Warrick.

Y hasta aquí podemos hablar de los españoles como catalizadores del partido. Mike Millar demostró estar tocado por una varita mágica y anotaba tres triples de forma casi consecutiva para ayudar en ese arreón en el marcador que dejó paralizados por momentos a los Raptors. Y todo ello pese a que Eddie Jones nos enseñaba que su intensidad en defensa no es capaz de conseguir la efectividad de antaño, que la cuesta abajo llama a su puerta y él ya se ha puesto el casco. Miller supo echarse al equipo a la espalda y de su mano firmaron un primer cuarto de sensación… de vivir, que era lo que al parecer no les dejaba Mike Fratello. En semejante atmósfera de euforia, Stromile Swift pareció por primera vez en mucho tiempo ser un buen jugador. Será que como el entrenador es nuevo, pretender engañarle poniendo toda la carne en el asador. Si no le conociera, diría que puede convertirse en una pieza clave. Pero como lamentablemente todos le conocemos, sabemos cómo acabará esto. Junto con Hakim Warrick y Rudy Gay podía formar el club de las headband. Es probable que los 3 se la pongan para no dejar escapar las escasas neuronas que demuestran jugando. En apoyo a las minorías, vaya.

Particularmente escandaloso resulta el caso de rookie de Connecticut, que comparte con Nicola Roncar una capacidad innata: hablar mucho sin decir nada. Lo malo que uno lo hace comentando y el otro sobre la pista. Algún arranque de calidad pudo verse, pero queda contrarrestado sin problemas por la inoperancia que demuestra sin el balón en las manos. Y pese a no llevar cinta como el menage a tríos comentado, no puedo reprimirlo por mucho más tiempo: Alexander Johnson. Con la falta sobre Garbajosa volvía a demostrar algo que llama la atención: lo que sufre cuando tiene a un jugador inteligente delante. Marc Jackson ya le mostró el camino y Garbjosa se lo pavimentó. Nervios, novatadas o problemas de iluminación (falta de luces), el broche lo acabó poniendo en el segundo cuarto. Apenas logró recibir un pase a 8 metros de canasta y sin rivales en kilómetros a la redonda. Controlado por fin (gran gesta que no podemos más que añadir a su cesta de logros personales), acabó haciendo dobles al iniciar la entrada a canasta. Cuando llegan los nervios, no hay quien los pare. Si lograra superar esos problemas de mentalidad, ya tendría gran parte del trabajo andado. Hasta entonces, a joder la cal con tanta arena.

Y a lo tonto nos situamos en plena remontada de los Raptors. Un triple, un robo, una bandeja… José Manuel Calderón se convirtió en uno de los principales artífices de la recuperación de los Raptors. Lástima que ayer Mike Miller tuviera la muñeca tonta y Darrick Martin decidiera hacer un buen partido. De muy gris final, pero buen partido al fin y al cabo. Ayer pudimos comprobar lo que llevamos tiempo intuyendo: Calderón le ha perdido el respeto a la canasta y asume mayores roles en la anotación del equipo. El desacierto de sus compañeros le impidió acabar con un mayor número de asistencias. Uno se pregunta como toda la audiencia el por qué de ese cambio Express al final del partido, pero tampoco logra entenderlo. Bien es cierto que quien suele revolucionar los marcadores es TJ Ford, pero ayer Jose también fue capaz de hacerlo. Todo ello, junto con la espiral negativa en que se fue metiendo Darrick Martin según avanzaba el partido, clamaba ese final de partido para Calderón. No así el reparto de minutos, que visto lo visto fue el justo.

Pau parece recuperar ya el tono. En ataque siempre se ha mostrado intratable, y ayer no hizo más que confirmarlo. En defensa, por ser las fechas que son, dejaremos viva la excusa de no forzar el pie, para no meter cizaña. Garbajosa dio el susto al final del partido, pero afortunadamente, los medios de comunicación no se han hecho eco de alguna lesión posible.

Los Grizzlies se llevaron el partido in extremis, tras un bajón considerable y sin Chris Bosh y TJ Ford en cancha. La mano de Barone tardará tiempo en notarse. Una mano no se nota en tres/cuatro días de entrenamiento. Lo de ayer no fue más que el resultado de la libertad. Un par de anotaciones y vía libre. Al menos logró dar resultado, sacar a los jugadores de una presión innecesaria a la que estaban sometidos con tanta rigidez y derrotas por doquier.

Las próximas semanas serán claves en el futuro de los Grizzlies… y en el de Pau.

sábado, diciembre 02, 2006

El partido de Cuatro. Toronto - Boston.

¡Qué menú, señores! ¡Qué menú! Sam Mitchell contra Doc Rivers. Dos estrategas de los banquillos frente a frente. Dos privilegiados de los banquillos (privilegiados, sí, muchos no hubieran aguantado). Faltaba Isiah Thomas para conformar un menage a trois de auténtico lujo. Para una orgía múltiple ya habría que hacerse con los teléfonos de Maurice Cheeks y Mike Woodson. No en vano son los banquillos más calientes de la competición. Al de los Raptors se le han revelado en casa, con las polémicas declaraciones de un jugador cuyo nombre no ha salido a la luz y que afirmó que les hace "correr por la cancha como pollos sin cabeza". Lo del de los verdes ya viene de lejos. Hace tiempo que la afición ya no está con él, y la verdad es que, si bien otras veces se cae en la crítica fácil, ayer hizo oposiciones a perder el culo en el plazo aproximado de una semana.

Sam Mitchell estuvo "probón". Arriesgó y al menos acertó. La defensa en zona del segundo cuarto apagó el torrente anotador en que se habían convertido los Celtics durante los primeros doce minutos. Sobre el papel, empezar a utilizar la variante (tan rumoreada durante la pretemporada) de los 3 hombres altos en cancha frente a un equipo cuyo mayor poder ofensivo se concentra en dos jugadores exteriores, era arriesgado. Sin embargo, acabó saliendo bien. Los experimentos del otro bando, sin embargo, no salieron bien. Doc Rivers se propuso tirar el partido cuando emparejó a Paul Pierce (demostró estar a otro nivel con su primer cuarto) con Chris Bosh. Si bien el de los Raptors puede encargarse de Pierce porque, pese a ser más alto, tiene una gran velocidad, en la relación inversa vemos cómo Chris no tiene problemas para lanzar por encima del de los Celtics e, incluso, atarcarle con ese primer paso demoledor. Scalabrine jugando minutos de importancia con Szczerbiak olvidado y Tony Allen (correcto, no obstante) quitándole minutos a Gerald Green (muy acertado ayer) fueron algunos de sus pecados. Bargnani sigue su ascenso e incluso se manejó bien en la defensa, Anthony Parker estuvo exultante por momentos y aviso para navegantes: TJ Ford estuvo extraordinario. Triste que haya que destacarlo, pero no cabe menos cuando en los últimos tiempos, desde prensa y aficionados de este país se está cayendo en la crítica fácil, en el acoso y derribo del "porque sí" de este jugador.

Y es que Calderón no necesita nada de esto para ganarse más minutos. Sigue demostrando que en este su segundo año le ha perdido el respeto a la canasta. Aprovecha su extraordinaria capacidad de penetración y la mala defensa de los bloqueos en la parte alta de la zona para anotar. Esto, junto con una mayor confianza en el tiro, nos permite ver un Calderón mucho más inicisvo, más anotador. No por ello despreciando la dirección del equipo. Su último minuto de partido, la única parte negativa. Hace tiempo que Garbajosa, por su parte, se ha asentado como titular de garantías. Sigue sin coger el truco a la distancia del triple NBA, pero desde la media distancia se mantiene letal. Colaboración en el rebote, capaz de dar ese pase de más que a veces le falta a Bosh, más que correcto en defensa (salvo cuando le tocó emparejarse con Paul Pierce, donde lo pasó mal por velocidad), muy inteligente a la hora de ver las líneas de pase... al otro lado del charco ya se han dado cuenta de que este no es un rookie cualquiera. Gran partido... y eso que aún no le entran de lejos.

domingo, noviembre 05, 2006

El partido de Cuatro. Toronto - Milwaukee.

Volvió la NBA a su emisión en abierto después de años y años de "privatización". La cadena del Grupo Prisa tuvo a bien volver a conceder a los aficionados al baloncesto un partido a la semana de la mejor liga del mundo. Como dice el refranero popular, a caballo regalado, al menos ya tienes caballo. Un caballo que producirá drogodependencia de Sogecable como buen reclamo que es. Conveniencia del falso directo, bombardeo que sufriremos a base de partidos de 3 equipos en particular... han sido algunas de las comidillas que han recorrido la red, pero más vale pájaro en mano que mearse en los pantalones. Después de años de sequía mentiría si dijera que me importan las condiciones en que comience el invento. El Ba-lon-ces-to (bueno, malo, edulcorado, mediatizado, pobre, individualista o como le quieran etiquetar) es lo que importa.

Sam Mitchell presentó su apuesta por el juego rápido, pero éste precisa aún de mucho tiempo para empezar a dar sus frutos. Pese a que la rotación de balón en muchos tramos del partido fue más que aceptable, hubo en todo momento mayor interés por tirar a canasta antes de haber consumido la mitad de la posesión que por conseguir una posición de tiro óptima. Estas semanas de entrenamiento con relojes de posesión corta han logrado cambiar la mentalidad, pero los Raptors no están en disposión todaíva (ni tienen las armas para ello) de llevar a cabo este run and gun con éxito. Milwaukee presentó las mismas intenciones de juego rápido, y es que con Villanueva y Bogut de juego interior, no puede haber otra opción que no sea esta, pero su falta de acierto en el tiro y la increíble fragilidad defensiva (normal que Ruben Patterson acabara desquiciado), pusieron el partido en bandeja de plata para los canadienses.

Un comienzo excelente de Morris Peterson y Chris Bosh concedió las primeras ventajas significativas a los de casa cuando el partido aún se estaba desperezando. Milwaukee naufragaba en ataque y sólo Charlie Villanueva y Michael Redd eran capaces de aportar lucidez de cara al aro. De hecho, si los Raptors no pudieron manejar mayores distancias en el marcador fue debido al comienzo desastroso de TJ Ford, que se dignó a ofrecer su peor versión durante la primera mitad. Suerte que salió Calderón y aportó mayor cabeza y tranquilidad al asunto, que al fin y al cabo era lo que solicitaba a gritos el equipo para administrar el marcador. La salida de Garbajosa no pudo ser más pornográfica: robo, asistencia, rebote y, con los ánimos calmados, triple. A partir de ahí su labor se vería reducida a los conocidos intangibles. Poco más puedes hacer cuando seleccionas bien los tiros y el balón no quiere entrar. Aún y con todo, el partido llegó empatado in extremis al descanso, y es que el regreso del gris TJ Ford a cancha supondría un global de -8.

Como si del Doctor Jekyll y Mister Hyde se tratara, el base tejano regresó tras el preceptivo descanso en un momento inconmensurable. Los ramalazos de genialidad esta vez sí encontraban destinatario y el aro se hacía un poco más grande. Incomprensiblemente, Sam Mithcell dejó que Garbajosa defendiera a Andrew Bogut mientras que protegía a Chris Bosh dejándole una presa fácil como es Brian Skinner. Milwaukee aprovechó para buscar a su pívot y encontró el camino tan despejado como el que le dejaron a los Raptors a la canasta durante todo el partido. El proteccionismo en defensa a su estrella le costó al equipo una cadena de canastas fáciles que impidieron llegar al último cuarto con la victoria más cerca. No hubo mayor problema. Nuestro Calderas se encargó de protagonizar una racha en la que Toronto encestó 9 de los 11 primeros tiros del último cuarto. El 67% global con el que acabaron los últimos 12 minutos, en contraposición al 32% que lucieron los de Wisconsin fue suficiente para permitirse el lujo de acabar el partido con los desterrados. Bargnani entre ellos.

Al final, victoria cómoda para los Toronto Raptors por 109-92.

lunes, octubre 30, 2006

La Previa. Toronto Raptors.


El año pasado consiguieron algo muy importante: no defraudar a nadie. Y es que nadie esperaba nada de ellos. Y así fue. Flashes de Charlie Villanueva, el sorpresón de Mike James, el agrado inicial con Calderón, Chris Bosh destilando clase... y muy poco más. Detalles individuales incapaces de esconder una realidad como equipo que, directamente, ni existía.

Viva Italia! Ravioli e gorgonzola!

El mismo día que Dallas y Miami comenzaban su batalla por conseguir el anillo de campeones, los Toronto Raptors, de la mano de Colangelo, ya habían hecho su primer movimiento: empaquetaban a Rafael Araujo, la causa perdida, a cambio de Kris Humphries y Robert Whaley. El primero, un ala-pívot del que se han podido ver algunos detallitos en la capital de "Mormonia" y, el segundo, cortado rápidamente. Conocido era su carácter polémico, por lo que se decidió no mantenerlo en el equipo. el traspaso que no sería tan bien recibido sería el que supuso la marcha de Matt Bonner junto con Eric Williams (se acabó la era de los Williams en Toronto) y una segunda ronda a los San Antonio Spurs a cambio de Rasho Nesterovic. Al meno y, bien mirado, conseguían un pívot, algo de lo que habían carecido durante todo el año. Hechos estos primeros "tanteos", llegó el día grande: el draft. Afortunados fueron, que se llevaron al agua el número 1. El día después del traspaso de Bonner se supo que Colangelo contrataba a Mauricio Gherardini como mano derecha. ¿Y esto a qué viene? A propósito del draft. Número 1 del draft en mano, ex-Benneton en la directiva, Bargnani en la pecera, blanco y en botella no puede ser otra cosa leche. De esta forma, el italiano se convertía en el primer jugador europeo en haber sido seleccionado con el número 1 en el draft de rookies. Un 3-4 muy alto, coordinado, móvil, con un tiro terrorífico que ha oído ya comparaciones con el alemán Nowitzki. Su magnitud no tiene visos de llegar a tanto, no obstante. Con el número 35, PJ Tucker, de la universidad de Texas, un escolta tan agresivo en ataque como duro en defensa. Con el número 56 seleccionaron a Edin Bavcic, traspasado posteriormente a Philadelphia a cambio de dinero.

Pero el verano no se acaba en julio, pese a lo atareado que había sido ya. No tardaba en llegar uno de los traspasos más inesperados, Charlie Villanueva abandonaba la franquicia. A cambio, llegaba TJ Ford, un base puro que sustituiría a la perfección la marcha de Mike James y que hará de los Raptors un equipo rápido. Después llegaría la pesca de calidad: Anthony Parker y Jorge Garbajosa firmaban sendos contratos valorados en 12 millones de dólares por una duración de 3 años. Todopoderosos en Europa, Anthony inicia su segunda etapa en la competición con la treintena cumplida, mientras que Garbajosa, del que ya ha trascendido el mote (originario del Foro ACB) de "pornoplayer", será rookie después de haberse colgado al cuello la medalla de Campeón del Mundo. Durante unos días John Salmons fue virtualmente jugador de los Toronto Raptors pero, una vez presentada la oportunidad de hacerse con los servicios de Fred Jones, su opción fue desestimada. El último refuerzo fue el del esloveno Uros Slokar, seleccionado el año pasado en el número 58.

Jugadores europeos... ¿Juego europeo? Nah


TJ Ford, recién renovado por cantidades abusivas (8 millones/año, siendo yo uno de sus mayores gruppies), fue contratado por Brian Colangelo para un fin muy concreto. Como base puro y eléctrico que es, deberá tomar las riendas del nuevo proyecto ganador (o no, el tiempo dirá) del ex-sun. Quiere en él otro Nash. Por detrás, Calderón ha sabido aprovechar su reciente baja en pretemporada para demostrar el nivel que atesora, pese a las dudas que ha llegado a tener Sam Mitchell sobre él. Estas cosas hay que dejarlas claras antes de que comience la función. Darrick Martin fue fichado la campaña pasada por los constantes problemas de lesiones de Alvin Williams. No hizo gran coas, pero parece que suficiente para quedarse. Morris Peterson es el único miembro de la vieja guardia que ha resistido a los avatares del tiempo. También es cierto que es el único que conserva nivel o, en su defecto, no ha plantado al equipo. Fred Jones aportará anotación e intensidad desde el banquillo, mientras que PJ Tucker tendrá que ver los toros desde la barrera. Anthony Parker regresa al territorio que nunca debió dejarlo marchar. La NBA vuelve a abrir sus puertas a un jugador que ha crecido en Europa lo que no le dejaron crecer allí. Joey Graham, físisco privilegiado donde los haya, cumplirá sus funciones de especialista defensivo del equipo. Chris Bosh, erigido la temporada pasada en santo y seña de la franquicia, continuará su viaje al estrellato más arropado que en anteriores ediciones. Seda fina. Nuestro Jorge sorprendió a propios (hasta los malagueños ocultaron la sorpresa tras la euforia) y a extraños (los yankees esperaban un role player cualquiera) durante los partidos de preparación. Empeoró sus números en los últimos pero, en líneas generales, supo tomar responsabilidades y dejar un gran sabor de boca a los canadienses. Será tutor personal de Andrea Bargnani, que inicia la saga de los "herederos de Nowitzki" (como si de Jordan se tratara). Vista la acusada escasez de aleros y pívots en la plantilla, así como la sobrecarga de cuatros, no sería raro verlos rotando posiciones. Rasho Nesterovic, el hombre que siempre cumple pese a las acusaciones horchateras, será el único center de la plantilla (Pape Sow, operado del cuello, baja hasta la 2007-08). Le asegura el puesto titular, pero los minutos serán otro cantar. Uros Slokar por altura y Kris Humphries por dureza, podrían contribuir a tapar el agujero que hay detrás de Rasho pero, por lo que parece, los minutos estarán caros.

Pronóstico:

Si bien la plantilla se ha europeizado en su forma, no parece que lo vaya a ser en su fondo. La decisión parece más motivada por la dificultad de contratar jugadores que acepten abandonar EE.UU para subir a Canadá. De momento, el experimento no parece ir mal: 7 a 1 en pretemporada.

martes, noviembre 01, 2005

Calentando motores. División Atlántica.


BOSTON CELTICS. JUVENTUD AL PODER

El proceso de reconstrucción de un equipo siempre es duro, muy complicado. Cuando ese proceso se alarga durante casi dos decenios y tiene visos de continuar así más tiempo, la situación a veces se torna en insoportable. Pero afortunadamente, no parece ser éste el caso de los aficionados verdes, que siguen al pie del cañón con su equipo, confiando en jóvenes promesas y añorando los tiempos mejores. De cara al esta temporada, que punto esta de comenzar, se presentan con las sensibles bajas de jugadores como Antoine Walker y Gary Payton, y las novedades de jugadores jóvenes como Dan Dickau y los rookies Gerald Green, Ryan Gomes y Orien Greene. Y, mientras tanto, persisten aún los rumores acerca de la posible marcha de Paul Pierce. De Portland a Clippers pasando por Denver, durante este verano se le ha colocado en varios equipos y, lo único en que todos coinciden es en que el escolta abandonará el barco. Si a esto le añadimos la implicación de Tony Allen en un intento de homicidio, es fácil pensar que la temporada se hará larga.

Quinteto titular:

Con la única duda del tiempo que tardará Al Jefferson en quitarle el puesto de titular a Mark Blount, los verdes se presentan con un quinteto sensiblemente inferior al que terminó la temporada. Delonte West sigue su conversión a base por buen camino, aunque el año pasado no terminó de convencer. La llegada de Dickau podría ponerle sobre aviso si no da resultados. Su gran temporada en los Hornets parece haber sido suficiente aval. Paul Pierce, a expensas de poder resolver su futuro cuanto antes, seguirá siendo el principal referente del equipo. Ricky Davis, ante la ausencia de un alero de mejores cualidades, parece que subirá al status de titular tras haber sido uno de los mejores sextos hombres. Mark Blount seguirá recolectando el cariño de la afición céltica con su apasionante entrega y trabajo (nótese el tono irónico utilizado por un servidor durante la frase) mientras que Raef LaFrentz, correcto sin más, seguirá siendo necesario hasta que llegue o surja alguien mejor.

Banquillo:

Acusada juventud. El quinteto suplente, de darse un par de circunstancias no muy complicadas, podría alcanzar una media inferior a los 23 años. Mientras que Dan Dickau (gran temporada, pero en un equipo como los Hornets) y Marcus Banks luchan por un puesto… esta vez de suplente, Tony Allen tendrá que resolver sus problemas con la justicia (no se espera que vaya a más), Gerald Green deberá soportar la terrible presión que supone ser la gran esperanza de toda una afición, Al Jefferson (que apunta muy alto, sí) deberá cuidar su falta de concentración (demasiados problemas de faltas) y su dificultad para moverse en defensa si quiere salir adelante y Kendrick Perkins tendrá que luchar por una oportunidad en un juego interior que no es nada del otro mundo. Mucho caos en el banco, donde pocas cosas son seguras: Orien Greene apunta a la D-League, Brian Scalabrine, con 26 años parece viejo entre tanto joven y Ryan Gomes ha hecho una muy buena pretemporada. Trabajito por delante, Doc.

Pronóstico:

Temporada larga y difícil la que se avecina en Massachussets. Demasiadas promesas y pocos “proyectos hechos” en la plantilla. Este año toca sufrir, pero al menos parece que en los draft hay acierto.



NEW JERSEY NETS. TRÍO DE ASES

La temporada pasada, la desgraciada lesión de muñeca que sufrió Richard Jefferson nos impidió apenas disfrutar de uno de los mejores juegos exteriores más espectaculares de los últimos años: una mente prodigiosa con dos artistas del aire a su servicio. Y es que si Jason Kidd se quejaba amargamente tras la marcha de Kenyon Martin, ahora puede estar contento con lo que le han regalado. Sin bajas sensibles en la plantilla, la llegada de Marc Jackson apuntala el juego interior (buen pretemporada la suya), mientras que hombres como el inclasificable Jeff McInnis, Scott Padgett o el rookie de Texas A&M Antoine Wright, llegan para fortalecer y dar refresco al peligro exterior

Quinteto titular:

Temible equipo titular con el que se presentan de cara al nuevo curso. Kidd, uno de los mejores bases de la competición y el más completo de todos ellos aspira a mantener la línea de su producción, donde no faltarán a buen seguro los triples-dobles. Vince se presenta ante el más difícil todavía: repetir lo del año pasado. Y es que tras el traspaso y en sólo media temporada, superó la barrera de los 30 puntos en cerca de 25 ocasiones. Muchos son los que lo acusan de haber rendido por debajo de sus posibilidades en ese comienzo de temporada (muy probable, por otra parte) pero su status de superestrella se mantendrá intacto. Jefferson deberá alejar el fantasma de su lesión a base de juego, algo que nadie pone en duda pero que todos esperan por el bien del espectáculo. No habrá problemas. Por su parte, Cliff Robinson y Marc Jackson se disputarán la titularidad, mientras que Nenad Krstic jugará con la tranquilidad de quien se ganó un puesto a base de trabajo y buen juego, en un año en el que sorprendió a propios y extraños.

Banquillo:

No es precisamente uno de los banquillos más completos de la liga, pero es algo en lo que la franquicia ha estado trabajando durante el verano. Zoran Planinic, que nos hizo sufrir durante algunos minutos en el Eurobasket, y Jeff McInnis, serán los encargados de dar oxígeno a un veterano Jason Kidd. Hombre como Antoine Wright (de momento no muy acertado en sus primeros pasos), Scott Padgett o Lamond Murray completarán el backcourt suplente. Por dentro, bien Cliff o bien Jackson supondrán un punch extra desde el banquillo, mientras que Jason Collins aportará la intendencia necesaria.

Pronóstico:

Con un quinteto así y estando en la desmejorada Atlantic Division, no parece complicado que se cuelen como primeros de división en. Lo que pocos pueden poner en entredicho es su presencia en Playoff.


NEW YORK KNICKS. TIEMPO DE OBRAS EN BROADWAY

Cuando Larry Brown decidí dejar el banquillo caliente y cómodo de Michigan, comenzaron a saltar las especulaciones: unos apuntaban a una posible retirada, aludiéndola a problemas de salud... y a la edad, que no perdona. Otros, la inmensa mayoría, daban por hecho su llegada a los Cavaliers para desempeñar el papel de director deportivo, una posibilidad que aunaba la retirada del fragor de los banquillos con el indudable atractivo de construir un equipo en torno a LeBron. Y, detrás de todos ellos, rumores que le situaban como uno de los nombres barajados para el banquillo de la Gran Manzana. Pero no, eso es imposible, los Knicks no son un "Equipo Brown". Y no, no lo son, pero esta vez gano el romanticismo: "El baloncesto empezó para mi en esta ciudad, y en ella quiero que acabe". El decidió, y ahora le toca hacer de los Knickerbockers un equipo competitivo... bueno, de momento, hacer un equipo. Porque si algo se ha visto durante esta pretemporada, era la falta de ese concepto colectivo en su juego. Mucha tela tendrá que cortar el vejete para acondicionar el equipo. Marbury, Crawford y Richardson son los primeros candidatos a ser aleccionados, no tardará en buscar gente más obediente (tanto es así que solicitó el fichaje de Eric Snow), pero durante este mes de calentamiento ha ocurrido algo que le pondrá en un aprieto: los rookies lo están haciendo bastante bien. ¿Hará como con Milicic?

Quinteto titular:

Stephon Marbury no cumple con el perfil de “base Brown”, ni mucho menos. Otros jugadores a lo largo de la trayectoria en los banquillos de Larry B sufrieron su estrictez: Allen Iverson pasó a jugar de escolta, mientras que Chauncey Billups tuvo que dar un pequeño giro a su juego. La verdad es que a ninguno de ellos les fue nada mal tras el cambio pero ¿será el caso de Steph? Poco probable. El autoproclamado mejor base de la liga (los hay que no tienen abuela) posiblemente seguirá en su posición, aunque más de un toque de atención recibirá seguro. Jamaal Crawford y Quentin Richardson se perfilan como los grandes quebraderos de cabeza para el entrenador. No en vano, entre los dos se jugaron la temporada pasada la nada despreciable cifra de 1143 triples mientras que los Pistons en su conjunto, tan sólo llegaron a los 1053. Tendrán que arreglarse ese resorte en la muñeca. En la posición de ala-pívot tendrá que elegir Antonio Davis y Malik Rose, trabajadores natos. Ahí no habrá sorpresas. Como pívot, Eddy Curry, cualquier otra opción le pondrá seriamente en evidencia. El trabajo nunca ha sido el fuerte de Eddy, pero su rendimiento este año está lejos de toda duda. Esperemos que el corazón no le dé más problemas.

Banquillo:

Nate Robinson se perfila como gran proyecto de futuro, pero estando Marbury por delante, se antoja imposible la titularidad. Hardaway está disfrutando de minutos y, de momento y salvo lesión, se espera que así siga. Lo que no es del todo descartable es que Larry dé el campanazo sentando a Crawford o a Richardson a favor de un alero trabajador. En esa posición precisamente es en la que Matt Barnes y Trevor Ariza están proporcionando la gran sorpresa de la pretemporada. Muy acertados ambos en los minutos de que disfrutan, y no se descarta que Trevor, gracias a sus condiciones defensivas, termine la temporada como titular. David Lee, Maurice Taylor, Antonio Davis… por falta de jugadores no será desde luego, aunque resulta especialmente esperanzador el rendimiento del rookie durante los partidos preparatorios. Jerome James y Channing Frye no son, precisamente, duros y consistentes en defensa, pero alguien tendrá que jugar.

Pronóstico:

Larry llegó avisando de que el proyecto no era a corto plazo y que se necesitaba tiempo, por lo que no se esperan grandes resultados de momentos. Sin embargo, para muchos, la reputación de Mr. Brown es un factor a favor. A priori no parecen meter miedo.


PHILADELPHIA 76ERS. BUSCANDO LA QUÍMICA

Cuando a mediados de febrero, se consumaba la llegada de Chris Webber al equipo, saltaban las casas de apuestas, que de repente colocaban a los de Pennsylvania como uno de los grandes favoritos en el Este e, incluso, llevaba a los más acérrimos seguidores a pensar en el trofeo Larry O’Brien. Era otro O’Brien, Jim, quien debía ocuparse de colocar las piezas de lujo de la mejor forma posible para lograr el objetivo. Sin embargo, la chispa entre el anotador más prolífico y el jugador con más clase de la liga, no surgió y el experimento dio al traste. Incluso se rumoreaba que no era precisamente afecto mutuo lo que se tenían. Ahora, todo son piropos entre ambos. De repente, quieren poner de su parte para que surja la química. Quién sabe en lo que puede acabar, pero su entendimiento es esencial para el equipo. La llegada de Maurice Cheeks, hombre de la franquicia y mentor de Allen, también influirá lo suyo.

Quinteto titular:

Gran quinteto el que presentan y muy equilibrado, mezcla de experiencia y juventud y con una extraordinaria pareja interior-exterior. Allen Iverson, exultante con la llegada de Cheeks, cumple 10 años en la liga (y como sixer), por lo que su motivación será si cabe mayor que la que ha demostrado noche tras noche durante todo este largo tiempo. Andre Iguodala (AI2) seguirá perfilándose como un jugador completo y perfecto compañero de Allen para las alturas, Kyle Korver deberá demostrar algo más a parte del hecho de ser un extraordinario tirador de 3. Por su parte, Chris Webber tendrá que hacer todo lo posible para que, con su ayuda, el equipo pueda aspirar a cotar mayores, mientras que Samuel Dalembert será otro de los que tenga que confirmar expectativas después de la renovación de contrato que ha firmado este verano. A crecer toca.

Banquillo:

Situación desoladora la de los recambios que tendrá a su disposición Maurice Cheeks para dar respiro a los hombres importantes. Tan sólo el ex hornet Lee Nailon y el pívot Steven Hunter parecen ofrecer garantías suficientes. El resto, grandes incógnitas. De Louis Williams se han hablado auténticas maravillas, hasta sucesor de Allen Iverson le han nombrado (el propio Allen fue a verle en algún que otro partido), pero con 19 años deberá primero adaptarse a un gran universo que se acaba de abrir ante sus ojos. John Salmons de nuevo se sale en pretemporada, pero en el momento de la verdad siempre pasa lo que pasa. Shavlik Randolph, que pagó su precipitación en el draft, se quedará a verlas venir. Si es que no aprenden, el mejor agente es el de Kevin Ollie…

Pronóstico:

Tratándose del Este, los Playoff estarán como siempre algo más baratos, pero la ausencia total de un banquillo solvente siempre acaba pagándose, tarde o temprano. Las aspiraciones dependerán en gran parte del grado de compenetración que AI y C-Webb sean capaces de alcanzar, pero la progresión de los jóvenes también será determinante. Del banquillo, poco que esperar.



TORONTO RAPTORS. TIEMPO DE BOSH

Primera temporada que los canadienses empezarán sin el que ha sido el mejor jugador de su corta historia, sin el jugador que marcó un antes y un después en toda una franquicia con su llegada. Con semejante situación, lo normal es que aparezca una clara dependencia. La temporada pasada ya lo sufrieron a partir de su salida (aunque lograron salir a flote), y en esta parece que las cosas no irán mucho mejor. El líder del grupo está claro, Chris Bosh, pero el equipo, por una u otra razón, no acaba de encontrar su camino. La novedad más importante es la confianza depositada en José Manuel Calderón, una gran noticia para los aficionados al basket de este país. De momento, la llegada de Mike James parece privarle de la titularidad, pero el cuerpo técnico (y la afición, según indican las encuestas) se muestra encantado con él. Y junto a ellos, dos rookies prometedores: Joel Graham y Charlie “sin cejas” Villanueva. Altas todos ellos que cubren ampliamente la marcha de Donnyell Marshall y el díscolo Rafer Alston.

Quinteto titular:

Mike James de momento está demostrando más resultados a nivel individual que colectivo, pero Sam Mitchell sigue concediéndole la titularidad. El año pasado no lo hizo nada mal en Houston y Milwaukee y cuenta con más experiencia en la liga que Calde, por lo que lo normal es que sea él quien salga de inicio al principio de temporada. Jalen Rose (según las malas lenguas, más fuera que dentro del equipo) aportará la experiencia en un equipo joven, además de ser uno de los encargados de llevar el peso anotador del equipo. Joey Graham será el encargado de apretar las clavijas en ataque gracias a su impresionante poderío físico, aunque en ataque el chaval tampoco es manco. Chris Bosh, como era de esperar y como resulta más que lógico, será el líder del equipo, peso que ya tuvo que llevar durante la segunda mitad de temporada. Preciosos movimientos en ataque, buen tiro… con un poco más de peso no debería tener problemas para entrar en la élite de la liga. Loren Woods parece haberse hecho en los últimos partidos con la posición de titular, aunque la progresión de Araujo (el año pasado se ganó el ostracismo de calle) parece evidente. Los 130 kilos del brasileño ayudarían bastante en la zona.

Banquillo:

Aquí es donde parece que tendremos que ver durante los primeros tramos de temporada a nuestro Jose, más tarde el tiempo dirá, pero de momento, le tocará ganarse el puesto, donde Alvin Williams ha regresado sin demasiado acierto y Tierre Brown no cuenta con continuidad. Mo Pete pasa a baza ofensiva desde el banquillo, mientras que Matt Bonner seguirá demostrando aptitudes desde el banquillo. El que se ha ganado el respeto y admiración de la afición a base de un gran rendimiento es Charlie Villanueva, probablemente el mejor rookie de la pretemporada y la sorpresa más agradable en Canadá. Alternará los puestos de alero y ala-pívot, pero la presencia en su posición natural de Chris Bosh le resta, obviamente, posibilidades de titularidad. A vista de los últimos partidos, parece que Araujo partirá desde el banquillo, sin embargo, sus resultados deberían señalar lo contrario. Veremos como se resuelve el asunto.

Pronóstico:

Temporada difícil para los Toronto Raptors, que parecen estar buscando ya acomodo entre los puestos de lotería del próximo año. Buenos cimientos, pero demasiada juventud.

martes, octubre 11, 2005

Mercado NBA [9]

Cuando parecia que poco o nada mas podria pasar en el mercado NBA, llegan noticias importantes, tales como el cambio de aires de una de las grandes incognitas de la liga, un traspaso que afecta a las posibilidades de futuro de nuestro Jose Manuel Calderon, un equipo que blinda su futuro... y equipos que a la desesperada tratan de encontrar ese robo que les de un plus de cara al largo curso baloncestistico.

Chicago traspasa a Eddy Curry (sign & trade) y Antonio Davis a New York a cambio de Tim Thomas, Mike Sweetney, Jermaine Jackson, las segundas rondas de los años 2007 y 2009, una primera ronda del 2006 condicionada y la posibilidad, en caso de que los Bulls quieran, de intercambiar las primeras rondas de 2007.
Pocas eran las oportunidades de que Eddy Curry se quedara en Chicago. Desde el verano pasado llevaba pidiendo una renovacion de su contrato a lo grande, pero si ya hace un año se cuestionaba en funcion del rendimiento en la temporada que aun estaba por comenzar, ahora, con problemas de corazon incluidos, resultaba toda una temeridad ofrecerle un contrato largo y cuantioso. Siendo inviable su renovacion por la franquicia de Illinois, lo mas factible era el traspaso en forma de sign & trade. Denver, Golden State, Memphis (para que querria Memphis otro hombre interior de ataque y parsimonia en defensa)... pero no, la solucion era mucho mas evidente de lo que en un principio pudiera parecer ¿Que GM seria capaz de ofrecer un contrato desorbitado a un jugador con problemas de corazon? Si, el mismo, Isiah Thomas. Con 23 años, aun puede ofrecer grandes cosas, se le presupone proyeccion por delante, pero desde luego que sobre el papel es una apuesta muy arriesgada. Junto con el, Antonio Davis, ala-pivot de 37 años, 14 millones en 1 año y que llega a disgusto. Por si fuera poco, se deshace de 1 primera ronda, 2 segundas y cede la oportunidad de intercambiar en 2007, por lo que mas le vale rezar para que a Chicago no le vayan bien las cosas. Si a eso le añades la perdida de un jugador de futuro como Mike Sweetney ¿Con que pretendes reconstruir el equipo? En fin.



Los Bulls completan un buen trade. Pierden a un jugador con altas pretensiones economicas y un buen veterano decomo Antonio Davis para recibir a cambio un jugador tambien de mucho futuro y con buen espiritu de sacrificio como Mike Sweetney, un jugador como Tim Thomas (en la misma situacion de Antonio pero mas joven) y varias rondas asequibles. No pinta mal para ellos, aunque con Curry nunca se sabe.
De explotar el bueno de Eddy, se cumpliria una "maxima" temida con los jugadores que llegan excesivamente jovenes: pagar 4 años a fondo perdido para que otro se lleve los beneficios.


Los Chicago Bulls, en su afan por perfilar la plantilla, renuevan al base Jannero Pargo. Reafirman asi su confianza en un jugador que antes de llegar al equipo paso por numerosas dificultades en Toronto y Lakers. Su ultima postemporada con el equipo y cu condicion de nativo de la ciudad, han decidido a su favor.


Seattle se organiza de cara al futuro. Los Sonics ejercieron las opciones de renovaciones albergadas en los contratos de dos de sus jovenes promesas (quiza las mas solidas): Nick Collison y Luke Ridnour. El primero, tras un primer año aciago (estuvo lesionado durante toda la temporada 2003-04, por lo que afectos oficiales, su año rookie fue el 2004-05) comenzo a dar muestras de su capacidad la temporada pasada, perfilandose como un buen ala-pivot. Los tiempos de gran referente de Kansas y excepcional promesa universitaria ya pasaron. Ahora toca demostrarlo en el campo. El segundo, otro gran jugador universitario que compartiera los dominios de Oregon con los NBA Luke Jackson y Fred Jones, ha visto como este año su importancia en la dinamica del equipo ha ido creciendo, a lo vez que lo hacia su propio juego. Progresando poco a poco, se ha colocado como un buen base de futuro y sin duda el equipo ha sabido reconocerlo. Ambos, en su ultimo año, cobraran 2.5 millones de dolares. Otro que se suma al carro de renovaciones en la franquicia es Reggie Evans, que si bien ha demostrado de sobra su inoperancia de cara al aro, no menos cierto es que a intensidad defensiva (extraordinario reboteador) y en capacidad de sacrificio, pocos le superan. Con el paso del tiempo, habria que entrar a valorar si esos 5 kilos al año son excesivos, pero su importancia no esta en duda. Y para terminar con el tiempo de cambios en Seattle, Ezra Williams y Tre Simmons (compañero del knick Nate Robinson y del laker Will Conroy el año pasado) pierden el tren de la NBA. A seguir luchando por un hueco. Esto es darwinismo.

Sin perder el carro de cortes y fichajes-prueba, varias novedades. Boston se deshace de Qyntel Woods, que llego al equipo en el traspaso de Antoine Walker. Los Clippers toman conciencia de que su posicion debil era la de alero, por lo que cortan a Frank Williams, Jan Jagla y Amal McCaskill y tendran a prueba a Rodney White. Vin Baker abandona los Rockets, mientras que los Lakers, hartos de ofrecer a todo GM viviente el contrato de Vlade Divac (ya retirado), deciden cortarlo. ¿Que tendran los jugadores que probaron con NJ la temporada pasada? Sam Clancy a Portland. Y ya van unos cuantos. Como tentados por ello, los Nets nutren su Training Camp: 3 pivots (Adam Chubb, Ben Handlogten y Arthur Johnson) y dos escoltas (Ricky Shields y Derrick Zimmerman). Los Timberwolves probaran con Ryan Humphrey (Memphis y Orlando), y dos bases que pasaron por la Minnesota Summer League: Marlon Parmer y el ex de Oklahoma State John Lucas. Matt Barnes buscara la suerte en New York mientras que, por su parte, los Kings recogen de la calle a Luke Schenscher, que en verano firmo un contrato con Denver pero paree que no termino de convencer.



Los Toronto Raptors traspasan a Rafer Alston a cambio de Mike James. Noticia cantada era la salida de "skip to my lou" del equipo, pues desde hacia ya tiempo, no mantenia buenas relaciones con el entrenador Sam Mitchell. Se le estaba buscando acomodo y finalmente han sido los Houston Rockets, un equipo que este año puede dar mas de una sorpresa. De esta forma, el que fuera 6º hombre el año pasado para los de Texas (y tercer maximo anotador del conjunto), pasa a ser el maximo competidor de Jose Manuel Calderon para el puesto de base titular del equipo. Un traspaso con doble lectura: hay quienes lo interpretan como un punto de confianza hacia el español, mientras que otros como una simple operacion para deshacerse de un jugador que desde hacia tiempo no comulgaba con las ideas del tecnico. Personalmente, me decanto por la segunda opcion, aunque tanto Babcock como el cuerpo tecnico, tienen buenas palabras para Jose. Por su parte, Houston sigue armando un equipo que puede aspirar a grandes cotas este mismo año, y lo hace con una autentica eminencia de los playground, un jugador extremadamente rapido y con un control de balon extraordinario. Sus dotes para poder dirigir bien al equipo tendran que demostrarse, pero a primera vista, supone un buen refuerzo. Lo que ha sorprendido han sido las declaraciones del Calderon al ser preguntado acerca de la llegada de un nuevo competidor: "Sinceramente, no conozco a Mike James". Pues date prisa, porque alli el que no corre vuela.

viernes, agosto 12, 2005

Mercado NBA [2]

Y por fin salto la noticia. Cuando parecia que por culpa del miedo de Fran Vazquez a demostrar que no es lo mismo pelearse con Felipe Reyes, Ruben Garces, Dejan Tomasevic, Gregor Fucka (con todo mi respeto hacia estos jugadores) que hacerlo con O'Neal, Duncan, Garnett, Brad Miller y un largo etcetera (estas cosas se piensan antes de mentir con tu firme decision de ir a la NBA) nos quedariamos con tan solo un español en la NBA, llego Jose Manuel Calderon, que el año pasado ya habia rechazado una oferta de los Milwaukee Bucks. Este año la decision ya fue firme (aprende Fran) y firmo por los Raptors. Segun declaraciones del propio base, en cuanto vio el gran trato recibido por parte de la franquicia, no se lo penso dos veces. La verdad es que tambien el puesto de base en Toronto esta mas barato que en otros equipos, para que engañarnos: Alvin Williams esta sumido en una espiral de lesiones, Milt Palacio ha demostrado de sobra que le viene demasiado grande la competicion, y las relaciones de Rafer "Skip to my Lou" Alston con el entrenador de la franquicia Sam Mitchell no pasan por su mejor momento. Calderon podra disfrutar de minutos, aunque no es muy alentador que el equipo canadiense siga mostrando interes por otros bases como Chris Duhon (una de mis debilidades).

Ray Allen, la niña bonita del mercado de agentes libres se queda en Seattle. La oferta de 80 millones por los proximos 5 años era irrechazable. Una muñeca de oro, un jugador con clase, estilo y tecnica que decide quedarse en el equipo (despues de haber pedido en alguna ocasion el traspaso) tras la buena imagen dada en los pasados Playoff. Parecia que equipos con mayor margen salarial y menor interes deportivo podrian haberse avalanzado sobre el pero tras la oferta de los Sonics la decision fue inmediata.

Portland corta a Derek Anderson y Nick Van Exel y se hace con los servicios de Juan Dixon y Charles Smith. Los primeros efectos de la amnistia firmada por el nuevo convenio , tambien llamada "Ley Allan Houston". Derek Anderson es cortado. Van Exel, concretamente, no es cortado, si no que han decidido no ejercer la opcion de renovacion que tenian sobre el. The Quick no iba a tener hueco con la progresion de Sebastian Telfair y la llegada del base estrella de Georgia Tech Jarret Jack y del base wizard Juan Dixon, que fue firmado un dia despues tras la gran campaña cosechada en Washington como escudero de Larry Hughes y Gilbert Arenas. Sorprendente el uso de esa amnistia cuando el principal candidato a ser cortado era Theo Ratliff. La renovacion de los Jail Blazers sigue su curso. Respecto a Charles Smith, el base/escolta paso la ultima campaña en el Scavolini Pesaro italiano, aunque su pasado NBA cuenta con Heat, Clippers, Spurs y los propios Blazers.

Phoenix ficha a Raja Bell. Un escolta que llega para cubrir la marcha de Quentin Richardson y la mas que segura baja de Joe Johnson rumbo a los Hawks. No es la mejor manera de mantener el rendimiento del año pasado, aunque hay que contar con la vuelta de Shawn Marion y Amare Stoudemire a las posiciones de 3 y 4 respectivamente. Pierden de un plumazo a sus dos escoltas del año pasado (bueno, uno de ellos jugo de pseudo-alero) y se hacen con Bell. El cambio salta a la vista, aunque tal vez les compense la presencia de un banquillo superior al del año pasado.

Orlando firma a Keyon Dooling. Le roban el base al eterno rival. Un base que no crea juego. Un base que no tira bien. Sus esperanzas estan en ayudar a la maltrecha defensa de Orlando pero ¿Hasta que punto sera recomendable jugar con dos jugadores con deficit en habilidades de direccion? Quien sabe. Seria mejor opcion colocar a Jameer Nelson de base (aunque la cosa tampoco mejor demasiado) y dejar a Steve Francis de escolta, aunque se niegue a ello. Lo negativo de la cuestion es que Travis Diener disfrutara de aun menos minutos de los que hubiera tenido.


Los Clippers se hacen con Cuttino Mobley y deciden no ejercer la opcion de renovacion sobre Kerry Kittles y Rick Brunson. Sacramento no tenia intencion de seguir con un escolta anotador como Mobley, ya que no era lo que se buscaba y menos por ese dinero. De esta forma se lo llevan los Clippers, que aumentan sus opciones en el perimetro y cubren una posicion en la que andaban demasiado flojos. Kittles pondra rumbo a alguna otra franquicia por el minimo mientras que el base Rick Brunson le cubrira las espaldas en Seattle al prometedor Luke "ricitos de oro" Ridnour.

En el capitulo de renovaciones y contratos de rookies, Chris Andersen se queda en New Orleans, Rebracca en los Clippers, Cliff Robinson en los Nets y Taft firmo por fin con los Warriors.