La buena temporada pasada (42 victorias engañan en el Este) no pudo ser culminada con la clasificación para las segunda ronda de Playoff. Tuvieron la desgraciada fortuna de cruzarse en el camino de un debutante en Playoff: LeBron James. El resto fue historia.
Los europeos sin decidirse y Stevenson mendigando un contrato.
Típico verano de capital. La población, harta del bullicio y el estrés con que se viven las demás épocas del año, opta por abandonar su ciudad y marchar a la playa. A falta de buenas playas que visitar en la zona, los sustitutos allí serán el rancho de la tía Mary, el viejo condado de Jefferson... esas cosillas de la sobremesa de Antena3. Del placer que rezuma quedarse en la árida y deshabitada capital en vacaciones vendrá la escasez de movimientos de los Wizards durante el periodo veraniego. En el draft, elecciones 18 y 48, el objetivo fue el mismo: el mercado europeo. Y el resultado, idéntico: los jugadores se quedarán en europa hasta que estén preparados para dar el salto. En primera ronda, el elegido fue Oleksiy Pecherov, un cuatro de los que adoran mirar a canasta gracias a su gran lanzamiento y del que, incluso, un conocido entrenador defensivo ha reconocido que su defensa no tan mala como cabría esperar. Prefirió sin embargo los minutos que le aseguraba Europa antes que la frialdad del banquillo del MCI Center. El otro, Vladimir Veremeenko, uno de los que recientemente se han visto afectados por la quiebra del Dynamo de San Petersburgo y que ha acabado aterrizando en el Khimki. En la agencia libre, el sabor europeo lo siguió poniendo Darius Songaila, que firmó por 5 años y 23 millones de dólares. Después de un año en los Bulls donde su rendimiento no fue todo lo bueno que cupo esperar, este contrato llega como agua de mayo. Pero sin duda, el mejor refuerzo fue la llegada de Deshawn Stevenson. Después de ver los precios que alcanzaba la oferta de los Knicks a Jared Jeffries, optaron por este jugador defensivo que permanecerá en la franquicia durante dos años y cobrando el mínimo. Una de las gangas del verano.
Big Trio.
Gilbert Arenas seguirá ejerciendo de supuesto base del equipo. Supuesto porque más allá de lo que las asistencias puedan indicar, no son capaces de ocultar lo visto en la cancha. Admitiremos al menos que consigue dar el pego, así como el terrible mérito que supone anotar 30 puntos y dar 6 asistencias. O el balón está siempre en tus manos, o tu visión de juego es excelente, o las dos cosas se unen en una sola. Parece que Antonio Daniels será su sustituto una vez más. Otro que no termina de convencer pero que consigue salir del paso de forma satisfactoria. Deshawn Stevenson llegó casi a hurtadillas. Y no es que hurtara mucho, su salario será irrirsorio para el desgaste que le tocará hacer en defensa. Jarvis Hayes anda en busca de la temporada sana que aún no ha podido disfrutar. Tendrá los minutos que quiera (o aguante), ya sea como escolta o como alero, puesto que ninguno de los dos puestos tiene un relevo natural en el banquillo de cierto nivel. Donnell Taylor y Roger Mason, dos medianías (tirando por lo alto), serán las otras opciones para el puesto de escolta. Caron Butler dio un pequeño estirón una vez liberado de los Lakers. Siempre será más divertido si el balón está repartido. Salvado al antes mencionado Hayes, un desconocido Mike Hall y un servicio a la comunidad de Darius Songaila serán los destinados a ocupar su descanso. Antawn Jamison llega después de vivir una experiencia aciaga con la selección de Estados Unidos. El mundo cambia y jugando así no se llega lejos. Tienes las armas pero no sabes utilizarlas, así debió sentirse. Llegará con hambre, con ganas de revalidar, como mínimo, la excelente pasada campaña. Darius Songaila llegó para como relevo de nivel para ambas posiciones de forward y, mientras sea capaz de ofrecer algo más que en Chicago, todo irá bien. Andray Blatche llega de hacer unas ligas de verano inauditas pero, de momento, no parecen estar siéndole de ayuda para entrar en la rotación. A esperar lesiones. Brendan Haywood tratará de mantener la titularidad, algo que, por cierto, no ha conseguido durante la pretemporada. Rebote e intimidación serán sus armas. Como también lo son las de Etan Thomas, que es el que le anda buscando las cosquillas. El hercúleo Michael Ruffin y el siete pies sin minutos Calvin Booth, serán el resto de opciones manejadas por el equipo para el juego interior.
Pronóstico:
Cambiada la pieza de Jeffries por Stevenson, añadido Songaila y recuperado Hayes, no hay nada que haga pensar que los Wizards puedan quedarse fuera de la postemporada. Una vez ahí, el objetivo será volver a las Semifinales de Conferencia.
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