De la gran sorpresa de la temporada 2004-05 al estacazo entre las orejas del año pasado. Decadencia absoluta con cambios de entrenador de por medio. El emergente juego interior parecía que les daría la opción de luchar por los Playoff, pero les queda mucho por recorrer.
Llámenlo Diop.
Increíble. Si algún equipo no necesitaba a un jugador como éste era Seattle y, respondiendo al principio de inoportunismo que lucen tantos General Managers, fueron los Sonics los que lo eligieron. Pívot, 7 pies, joven, verde y mucho kilo por engordar. En esa descripción ya encajaban Robert Swift y Johan Petro, las elecciones de las dos últimos años. Y con ella encaja Sene, un jugador con todo por pulir, con una gran envergadura y un juego ofensivo muy escaso, casi inexistente. 3 draft, 3 jóvenes por formar y un puesto para todos ellos. Las críticas llovieron pero, cosas del destino, ahora será imprescindible. Con el número 40, los ojos de Rick Sund se posaron sobre Dehnam Brown, el enésimo proyecto de Connecticut en este sorteo. Un jugador exterior, orientado a la defensa y que pareció no ser del gusto de Brian Hill, que ya se lo ha cargado. El 53 fue el turno para seleccionar al isarelí Yotam Halperim, que esta temporada ha cambiado el todopoderoso Maccabi Tel Aviv por el pujante Union Olimpija esloveno con excelentes resultados. Mickael Gelabale hace realidad el sueño que le impidió posar los pies sobre el suelo de Madrid durante el último año. El Gelabale que consiguió ser seleccionado en el draft de la NBA no sio señales de vida y en su lugar hizo acto de aparición un joven descentrado que pretendía demostrar demasiado en una sola jugada. Mikki Moore, irrelevante como pocos, fue traspasado a los New Jersey Nets a cambio de una segunda ronda de 2009. Chris Wilcox consiguió, por su parte, la tan ansiada renovación: 7 millones/año gracias al rendimiento dado después del parón del All-Star. Finalmente, el esperado refuerzo exterior llegó por partida doble: Kareem Rush y Desmon Farmer. Se acordará Rush dee la oportunidad desperdiciada en Charlotte, como del extraordinario episodio que protagonizó en los Playoff de 2004 contra Minnesota para darle el pase a la final a su equipo. No termina de romper, y a estas alturas...
República sabanera. Cayó el Rey León.
Año tras año, Luke Ridnour ha ido consolidándose a base de minutos. Alcanzada la madurez, ya sólo le falta confirmarse como uno de los bases de futuro más apreciados de la liga. Destaca lo suficiente como para ser un base que muchos querrían tener en su equipo. El que no era tan apreciado y parece haberse reinventado es Earl Watson, que la ramplonería exhibida en Tennesse ha añadido una mayor confianza en su juego exterior. Los resultados quedan a la vista, y es que ha pasado de ser uno de los hombres de banquillo importantes en el equipo. El tiempo de Ray Allen pasó ya a mejor vida, como sus aspiraciones a lograr algo más. Ilustre veterano, al menos le sobra calidad ofensiva a raudales y una elegancia en el tiro al alcance de muy pocos. Elegancia que no entra en saco roto: la campaña pasada logró el récord de triples anotados en una temporada. Vistos los problemas de relevo, el sustituto fichado al efecto fue Kareem Rush. Tiro exterior, producción en ataque y agujero considerable en defensa. Rashard Lewis, el Young Fella de la NBA y eterno terrateniente de Sugar Ray, seguirá siendo parte imprescindible de la ofensiva de Seattle. De la defensa que se ocupen otros, como es el caso de Damien Wilkins, uno de esos free agents que llegan un día a la desesperada y a base de trabajo y sacrificio en la cancha se encuentran con un puesto fijo. Mickael Gelabale ya tiene lo que quería. Desde 2005 su cabeza estaba aquí. Tanta prisa será porque tiene algo que ofrecer... ¿O no? Chris Wilcox hizo válida la tradición del último año de contrato. Le van las emociones fuertes, porque apuró hasta la segunda mitad de temporada tocándose los... Nick Collison demostró estar totalmente recuperado de la lesión de hombro que lo mantuvo un año en el dique seco. De aquí hacia arriba, es el camino que apunta. No ha empezado la regular y Danny Fortson ya ha tenido problemas por su actitud en el campo. El que tuvo, retuvo. Y habiendo tiempo para eso, también lo hay para lesiones: Robert Swift, que presentaba este año un look rompedor (mezcla de Gasol y el Rey León con los tatuajes de Prison Break), lo que rompió fue su rodilla, diciendo lamentablemente adiós a la temporada. Johan Petro recibe pues, días antes del comienzo de la liga, la titularidad ineludible del equipo. Y el suplente no es que sea más maduro que estos dos pipiolos: Saer Sene, al menos, podrá desarrollarse en campo y con minutos.
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